La primavera y la pandemia nos dejan paseos por la ciudad como plan prioritario y en ocasiones, único. Desde hace un tiempo, poder pasear es un lujo que saboreamos de manera consciente; recorrer la cuidad, descubrir espacios y admirar nuestros rincones. Intentamos impresionar a nuestros hijos contando anécdotas y leyendas que antes otros nos contaron y con sus ojos, descubrimos detalles y, últimamente, niveles de suciedad alarmantes que, por habituales en la imagen, nosotros no sabíamos percibir.

La foto de los últimos paseos está desbordada por jaramagos y colores, moquetas del abandono. Los jaramagos, síntoma de buen tiempo y de dejadez, ocupan solares y arriates, cunetas y alcantarillas. Desde la ribera hasta cualquier acerado. Las flores, esas que son mimadas y cuidadas, expuestas con orgullo en nuestra fiesta centenaria, se revelan y evidencian por muchas zonas, las vergüenzas de los que estos días se hacen tantas fotos. Fotos incluso en Trueque 4, cerrado a cordobeses como Centro de Interpretación de los Patios de Córdoba, pero abierto para pose de autoridades y famosos. Fotos entre geranios y cal blanca, mientras lo verde aflora incontrolado, sin límite de salubridad, por tantos rincones de nuestra ciudad.

Días grandes para nuestra tradición y nuestra cultura, que poco tiene que ver con inversiones y estrenos recientes en nuestros teatros. Que muchos seguimos incrédulos ante la aparición estelar en el Gran Teatro de Jorge Javier Vázquez -sí, el de Rociito, kikos varios y sálvames diversos- como actor. El escándalo no es por posibles valoraciones personales, viene por la apuesta cultural de este Ayuntamiento, por no saber qué se persigue, si calidad o cantidad. Por intuir la foto con el famoso como prioridad. Es la indignación por conocer compañías de teatro local, actores y actrices que están pasándolo peor que mal, cantera que languidece y estructuras cercanas que caen, mientras televisivos sin mérito actoral que justifique una inversión pública, son quienes finalmente, se suben a nuestro escenario. ¿Hay en el Ayuntamiento alguien con una mínima sensibilidad por la cultura o, como parece, lo único que se busca es el postureo hueco?

Mucha foto. Fotos inaugurando plazas, los mismos que criticaban los cambios de nombre en la legislatura pasada, sin que muchos hayamos sido conscientes de que ahora sí -en medio de todo esto- es un reclamo de la ciudadanía. Fotos y fotos. Fotos con famosos, fotos con bandera, fotos en patios cerrados. El efecto de la imagen es incuestionable, necesitamos fotos y ver a nuestros gobernantes posando y mostrando lo que se hace. Estaría también bien, que se dotara de contenido. Que, de fotos ya vamos sobrados.