El consejero de Interior, Jordi Jané, ha asegurado que el mantero que falleció el martes en una operación de los Mossos d'Esquadra contra el top manta cayó solo del balcón de su piso de Salou, sin que ningún agente le tocara, aunque la familia duda de esta versión y ha denunciado a la policía. En una rueda de prensa, Jané ha desvelado que dos testigos que estaban en la plaza de Sant Jordi han corroborado que no hubo ningún tipo de contacto físico, en ningún momento, entre el mantero, Mor Sylla, y los mossos que entraron en la habitación en la que se encontraba.

Según la versión esgrimida por el consejero Jané y el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, en la habitación había dos personas, una de las cuales se quedó quieta atendiendo al requerimiento policial, mientras que la víctima salió al balcón por una puerta corredera y se subió a la barandilla, de la que se desprendió mortalmente al vacío. "No sabemos exactamente si quería saltar al piso de abajo o si resbaló cuando estaba cogido de la barandilla. Nos consta que la mossa d'esquadra (que entró en su habitación) no interactuó físicamente con él, que no hubo contacto físico en ningún momento", ha insistido Jané.

Por su parte, Trapero ha indicado que, cuando el hombre se dirigió hacia el balcón, la agente se acercó y le dijo "quieto, ¿dónde vas?", aunque "sin tocarle en ningún momento". "La agente ve cómo al hombre le resbalan las manos. Parece que se quería apoyar en un toldo del segundo piso, pero cae al vacío", ha relatado. Trapero ha insistido que desconocen los motivos por los que la víctima salió al balcón, aunque ha apuntado que en la misma operación, en un registro en una vivienda de un segundo piso en la calle Venus, otro de los supuestos miembros de la red se descolgó por la ventana para acceder a la planta inferior y trató de forzar la ventana del primer piso, aunque un vecino alertó a la policía y pudo ser detenido.

Por el contrario, la familia de la víctima ha denunciado la actuación de los Mossos d'Esquadra en el juzgado, al dudar de la versión policial. En declaraciones a los periodistas, un hermano de la víctima ha asegurado que los Mossos d'Esquadra apoyaron contra la pared al resto de detenidos que estaban en la vivienda y que a su hermano lo apoyaron contra el balcón. "Es lógico que si te apoyan contra el balcón, vayas al suelo", ha agregado.

Por otra parte, Trapero ha precisado que los agentes no grabaron la entrada y el registro en el piso, ya que la policía catalana no toma imágenes de todas las intervenciones policiales porque presuponen que hacen las cosas "bien hechas". También ha confirmado que la secretaria judicial que tenía que supervisar el registro, autorizado por un juez, aún no había entrado a la vivienda cuando el mantero se precipitó desde el balcón, ya que permanecía en el portal a la espera de que los agentes aseguraran la vivienda.

Unos 200 miembros de la comunidad senegalesa se han manifestado por las calles de Salou para protestar por la muerte de su compatriota, en una marcha en la que había mucha tensión pero en la que apenas ha habido incidentes, más allá de una discusión con el dueño de un bar, al que han lanzado sillas y botellas cuando un cliente les ha recriminado su conducta del martes.

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha abierto una investigación de oficio para aclarar las "versiones contradictorias" y el alcalde de Salou, Pere Granados, ha convocado una Junta de Seguridad Local con carácter extraordinario, a la que asistirá el consejero Jordi Jané, para analizar los hechos y la lucha contra el top manta. El secretario general de ICV, Josep Vendrell, ha exigido la comparecencia del consejero en la diputación permanente del Parlamento, prevista para finales de agosto, para que aclare los hechos.