Se acabó el papel. El Córdoba Futsal ha agotado los 800 carnés de simpatizante que, de momento, ha puesto a disposición de sus aficionados para la peculiar temporada 20-21. El club blanquiverde optó por esta novedosa fórmula, que da derecho a adquirir entradas durante el curso al 50% de su precio habitual, ante la dificultad para poner en marcha una campaña de abonados al uso por las restricciones de público en recintos deportivos cerrados impuestos por la Junta de Andalucía ante la crisis del coronavirus.

Y la respuesta de sus seguidores ha sido notable. Ya desde el lunes, cuando arrancó la venta de estos carnés, quedó patente que el cupo establecido, por ahora, con la entidad cordobesista iba a ser cubierto de sobra. Tras expedir 341 boletos el primer día y 330 el segundo, los 75 del miércoles dejaron apenas 54 abonos para este jueves, que han sido retirados a lo largo de la tarde en la sede social del club de la calle José María Martorell.

De esta manera, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad se garantiza el apoyo máximo que ahora mismo, por ley, puede tener en sus compromisos en Vista Alegre. Habrá que ver si cuando llegue la hora de competir, en principio el próximo 5 de septiembre aunque aún no hay siquiera calendario establecido, las restricciones de los estamentos gubernamentales permiten elevar el aforo por encima de los 800 espectadores... aunque viendo la evolución de la pandemia tampoco sería descartable que tuviera que jugarse de nuevo a puerta cerrada.

Imagen con la que el club ha anunciado la venta de todos sus carnés.

De momento, la falta de un protocolo anticovid para la vuelta a la competición por parte de la Real Federación Española de Fútbol ha empujado este jueves a los clubes y la Liga Nacional de Fútbol Sala a suspender todos los partidos amistosos de esta pretemporada con carácter indefinido. El Córdoba Futsal y el UMA Antequera ya han anunciado oficialmente que no jugarán el próximo miércoles 12 en Vista Alegre como tenían inicialmente previsto, y habrá que ver en qué queda el resto.