Todos los años al llegar diciembre se produce una mezcla de lo más peculiar. Rodeados de villancicos y nacimientos, los primeros trajes de flamenca hacen su primera aparición. Con las presentaciones de SIMOF y We Love Flamenco muy recientes, la última aparición de volantes y lunares ha sido en el tradicional desfile Úniqo Qlamenco, que este año ha celebrado su VI edición. Primer avance de lo que serán las tendencias en moda flamenca de 2024, este desfile está ya consolidado como el pistoletazo de salida a las grandes pasarelas que marcarán la temporada flamenca del próximo año.

Precedido de una mesa redonda en la que el tema a tratar ha sido el mantón de manila, este desfile, organizado por la Asociación de Diseñadores y Empresarios de Moda y Artesanía Flamenca, Qlamenco, tiene como objetivo fomentar y promocionar la artesanía hecha en Andalucía. En esta edición han participado un total de 19 diseñadores, que han presentado sus propuestas en la Casa Fabiola.

Además de la mesa redonda, titulada El mantón de Manila, de Cantón a Sevilla, y del desfile, la acción con la que Qlamenco busca potenciar la moda flamenca termina con el desarrollo de una exposición (también en la Casa Fabiola y con el mismo nombre que el de la mesa redonda) que comienza el 20 de diciembre y puede verse hasta el 21 de abril de 2024.

Las tendencias en moda flamenca para 2024 que avanza Qlamenco

Con la participación de casi una veintena de diseñadores, el desfile de Qlamenco sirve como primera toma de contacto con las tendencias que se verán sobre la pasarela en 2024. Diseños muy femeninos en los que predomina el color y el juego con los volúmenes son los que presentaron estos artesanos de la moda flamenca. Además de adelantar las tendencias, muchas de estas propuestas son la avanzadilla de sus propias colecciones con las que desfilarán en las grandes pasarelas de moda flamenca.

• Alejandro Andana: El diseñador propone un traje de flamenca en color verde esmeralda muy entallado y con volantes de capa fruncida. Destacan la artesanía del escote, que es de inspiración años 50 y está decorado con pedrería asimétrica.
• Agus Dorado: Confeccionado en un corte sirena, su propuesta presenta una falda en nesga, escote a la caja y mangas de farol recogidas en la zona baja del vestido con una cinta. Presenta dos volantes canasteros de tres paños cada uno con enaguas en negro y aplicaciones en la parte superior con plumas, borlas de terciopelo.
• Amalia Vergara: La diseñadora juega con los tonos mandarina en un diseño con un escote en forma de corazón pronunciado y escote redondo en la espalda. La silueta es entallada y presenta volantes cruzados, tachuelas, pequeños espejos de diferentes formas y tamaños, piedras de color, lazos de raso y brillo para los adornos.
• Ángeles Verano: La diseñadora ha creado un mantón exclusivo para este desfile. El diseño, en tonalidades malvas, lleva las asimetrías y la superposición de tejidos. Los detalles en las mangas y vivos, confeccionados de manera artesanal, dan el toque final al diseño. Los complementos son de la firma Fina Estampa.
• Atelier Rima: La firma presenta un traje de flamenca de estilo rociero con escote en barco, de manga larga, con corte a la cintura y faldón canastero realizado en tablones. La parte superior lleva incorporada una pieza decorativa tipo poncho de crochet.
• Carmen Latorre: El traje de flamenca de la diseñadora lleva volantes en forma de flor reversible, para darle protagonismo al tejido, así como gran volumen en las enaguas de organdí. El cuerpo está formado por cortes abiertos al bies, también reversibles y unidos por trabillas de punto de ojal en rosa y cordón de seda fusionando ambas partes del cuerpo. Un volante en un hombro da volumen y equilibrio a la prenda, acentuando el diseño asimétrico, tanto en el cuerpo como en la falda.
• Cristina Vázquez: El diseño consta de dos piezas: un vestido a la sisa y una confeccionada con tiras de gasas de distintos colores. Lleva puños y cuello drapeados con gasa color naranja. El diseño presenta bordados realizados a mano con terciopelo unido con punto de cadeneta al que ha añadido algunas piedras cosidas a mano.
• Fina Estampa: La firma ha reinterpretado un mantón como guiño a los 100 Años de Juan Foronda confeccionado artesanalmente en malla metálica estampada con remate de flecos color oro.
• Francisco Tamaral: El diseñador presenta un traje de flamenca con corte clásico ceñido hasta la rodilla y con doble volantón. Escote cerrado en la espalda y redondo por delante. Los volantes canasteros son de doble capa con subida de la segunda. Su diseño, que recuerda al degradado, está teñido a mano en tonos turquesa, morados, amarillos y naranjas.
• Inma Benicio: Su propuesta es un vestido entallado malva con escote cruzado delantero y corte en la cintura. Cuenta con un solo volante de capa cosido y vuelto. El escote de la espalda se presenta con escote en forma de pico y se remata con una chaqueta torera con distintos tejidos, lentejuelas y drapeados
• Inma Castrejón: El vestido, malva, lila, buganvilla y tonos rosáceos, lleva transparencias y bordados enrollados contrastando los distintos colores para potenciar las formas femeninas. La falda, muy entallada, tiene gran volumen en los bajos y volantes bicolor. Las mangas, rectas, dan un protagonismo especial a la transparencia, bordados y hombreras.
• Javier del Álamo: La propuesta del diseñador es un vestido largo entallado hasta la rodilla, con una falda de capa, rematada con volante de capa y una enagua con dos volantes vistos de organdí realizados al hilo. Las mangas son jamoneras y abullonadas, confeccionadas en tejido color verde acanalados con purpurina con reflejos en tonos malvas y negro.
• Juan Foronda: La firma ha realizado un vestido de corte clásico, inspirado en la indumentaria goyesca. Es de seda salvaje en tono rosa fucsia, con detalles integrados en el propio diseño de flores bordadas en colores diversos y fornituras elaboradas a mano. El look está engalanado con un mantón de la firma, de seda 100% natural bordado a mano.

• Manuel Odriozola: La propuesta del diseñador se trata de un vestido de corte muy femenino con líneas curvas que acentúan la figura. La línea se marca hasta las rodillas para luego abrirse. Las mangas raglán llevan exagerados volantes en el antebrazo. En negro y rosas teñidos a mano, también lleva bordados con bolas de sedería y cristales de Swarovski.

• María Amador: Su diseño es un vestido de vuelo desde la cintura con corte canastero en la falda, donde lleva una especie de delantal bordado a mano de forma artesanal diseñado en exclusiva para la ocasión, representando dibujos propios del tarot.

• Marina Moda Flamenca: Se trata de un vestido de nesgas realizado en tul bordado con cuentas nacaradas, forrado en seda salvaje. Las mangas son asimétricas. Una es más voluminosa y corta y, la otra, larga con transparencias.

• Raquel Bollo: La diseñadora propone un total look inspirado en la indumentaria masculina de los tablaos flamencos de los años 70. Está compuesto de tres piezas: pantalón pitillo realizado en crepe de seda, chalequillo en tafetán y camisa en gasa. Negro, ala de mosca y tornasol son los colores utilizados en distintas tonalidades.

• Yolanda Rivas: El cuerpo, en nesgas, lleva escote hasta la cintura trasera y transparencia, delante. La falda lleva dos volantes de cancán blanco y organdí de lunares. Éstos van recortados en diferentes tamaños y pegados con adornos de ondulina y madroños. Las mangas llevan pliegues al principio, en globo y terminan con un gran volante festón.

• Sonibel: La firma propone un vestido rojo satinado de corte clásico de sirena con falda doble y cancán. Volantes muy grandes, escote pronunciado y falda con mucho vuelo. Sonibel ha utilizado crepe con elastano. El cuerpo y los filos de todos los volantes están adornados con encajes de bolillo.