Si por algo es conocida la provincia de Córdoba es por su riqueza y variedad oleícola. 

El AOVE se ha convertido, por derecho propio, en uno de los protagonistas de la mesa. Ha dejado de ser un aderezo más para tornar en el mejor aliado con el mejorar, enriquecer y destacar los matices de los alimentos. 

El gran público cada vez entiende más de las propiedades nutricionales y organolépticas del oro líquido y proliferan los gourmands a la caza de las mejores referencias. 

Picual, arbequina, hojiblanca, lechina, picuda... Todo un discurso se articula en torno a la variedad de la aceituna.

¿El paso siguiente? Decantarse por un aceite monovarietal o un coupage. 

Trío de AOVES Emporium

No obstante, al margen de gustos y preferencias, los catadores de medio mundo dan cada año sus bendiciones a nuestro producto más genuino. 

Los AOVES de Almazaras de la Subbética pulverizan todos los récords. En la última edición de los Premios Mezquita, su aceite Rincón de la Subbética ha conseguido el Premio Especial Diputación de Córdoba y también se ha alzado como el kosher más puntuado. El Premio Especial Aula del Olivo ha ido a parar a Rincón de la Subbética-DOP Priego de Córdoba. 

Este coloso de Carcabuey también luce ya en sus estanterías varios Premios Gran Mezquita gracias a Rincón de la Subbética, Parqueoliva Serie Oro y Rincón de la Subbética Altitude. 

En el podium de estos galardones también están Venta del Barón, de Muela Olives (Premio Gran Mezquita) y Empiedro, de Cooperativa La Purísima (Oro), Cerro de las Vacas Arbosana (Premio Gran Mezquita Oro), Molino del Duque Hojiblanca (Oro) para Cooperativas La Aurora.

Cortijo del Prado

En el mismo certamen han obtenido sendas platas dos de los AOVES que los expertos coinciden en que están llamados a convertirse en referentes de la provincia: Emporium (Puente Genil) y Cortijo del Prado (La Rambla).

Aceite ecológico de Cortijo La Reina

Auténticas joyas

Otra de las marcas cordobesas que más ha dado de qué hablar es 1490, que ha llevado a cabo colaboraciones con prestigiosos chefs como Kisko García o una edición deluxe con el diseñador cordobés Palomo Spain. Su contenido es tan apetecible como su packaging, lujosas ánforas de cerámica de La Rambla pintadas a mano. 

En esta línea preciosista está el ecológico Cortijo La Reina, embotellado en un frasco de cristal verde que no sólo protege las propiedades naturales del AOVE sino que es un auténtico deleite para los sentidos,