Medio Ambiente

Córdoba acapara el 24% de los ejemplares de lince que hay en la Península Ibérica

  • El último censo realizado por el grupo de trabajo que coordina el Gobierno revela que la zona de Andújar-Cardeña cuenta con 216 ejemplares, por los 51 de la zona del Guadalmellato

Un ejemplar de lince.

Un ejemplar de lince. / El Día

Córdoba acapara el 24% de los ejemplares de lince que hay en la Península Ibérica, según el último censo -el correspondiente a 2020- realizado por el grupo de trabajo que sobre este animal coordina el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco). De los 1.111 ejemplares censados en España y Portugal, 267 se distribuyen por tierras cordobesas.

Tal y como revela el informe, el núcleo poblacional de linces de de Andújar-Cardeña (Jaén y Córdoba) cuenta con un total de 216 individuos censados en 2020 de los que 140 son adultos o subadultos, y entre ellos 53 hembras reproductoras; mientras que el núcleo poblacional del Guadalmellato tiene un total de 51 individuos censados, de los que 35 son adultos y 16 cachorros, contabilizándose 16 hembras reproductoras.

En 2020 se registraron 14 núcleos poblacionales de linces, de los que 13 se hallaron en España –Andalucía con cinco núcleos, Castilla-La Mancha con tres, y Extremadura con cinco- más un núcleo en Portugal. Los otros tres núcleos Andaluces son Doñana –Aljarafe (Sevilla-Huelva), que cuenta con 85 individuos, de los que 71 son adultos o subadultos – con 20 hembras reproductoras- y 14 cachorros; Guarrizas (Jaén), que acoge 140 individuos, de los cuales 95 son adultos y 45 cachorros; y el área de Sierrra Morena Central, que alberga un total de 14 ejemplares censados en 2020, de los cuales ocho son adultos, de ellos dos hembras reproductoras que han producido seis cachorros. Andalucía suma así 506 ejemplares.

El informe señala que "el total de ejemplares censados durante 2020 en toda su área de distribución ibérica fue de 1.111, repartidos entre Andalucía (506-45,5%), Castilla-La Mancha (327-29,4%), Extremadura (141-12,6%) y Portugal (140-12,5%)". "Esta cifra constituye el máximo numérico registrado desde que existen programas de seguimiento de la especie y supone un aumento muy significativo, teniendo en cuenta que en el año 2002 se contabilizaron menos de 100 ejemplares", apunta el documento. 

El grupo constata que el pasado año fue muy bueno para la evolución poblacional de la especie, con un incremento del 30% respecto al censo de 2019. Por primera vez desde que existen datos cuantificados de la población de lince ibérico, se ha superado la cifra de 1.000 individuos censados, "lo que supone un hito muy relevante en el proceso de recuperación de esta especie y de mejora de su estado de conservación"."Esta curva demográfica permite ser optimista y dibuja escenarios que alejan al gran felino ibérico del riesgo crítico de desaparición", defienden. No obstante, los expertos piden prudencia e insisten en la necesidad de mantener los esfuerzos y los programas en marcha, dado que la especie no está fuera de peligro y sigue legalmente considerada “en peligro de extinción” en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.

Las cifras aportadas por los censos de las diferentes comunidades autónomas españolas dan unos resultados de productividad de cachorros nacidos/hembra territorial de 1,7 en el cómputo general para España, mientras que los resultados de Portugal fueron de 2,3. Para las comunidades autónomas españolas, los ratios fueron los siguientes: Andalucía, con 1,3 cachorro nacido por hembra territorial; Castilla-La Mancha, con 3,1, y Extremadura, con 1,2. La proporción entre machos/hembras maduros e inmaduros (sex ratio) censados resultó de 1,04 a favor de los machos (330 hembras por 346 machos). En 2020 se contabilizaron 414 nacimientos de 239 hembras reproductoras. 

El declive de las poblaciones de linces ibéricos en libertad ha sido una constante desde la década de 1950 hasta al menos el año 2004, en toda su área de distribución. La persecución humana y la escasez de conejos -animal del que se alimenta principalmente el felino- fueron las principales causas de dicho descenso de la población, llevando a la especie a estar en los umbrales mismos de la extinción. Por ello, desde principios del siglo XXI se han puesto en marcha distintas iniciativas de conservación, entre las que destacan distintos proyectos Life desde 2002 hasta la actualidad o el desarrollo de la cría en cautividad dentro del programa de conservación ex situ. Gracias a este gran esfuerzo de conservación, la población de linces ibéricos no ha dejado de crecer numéricamente y en relación a su área de presencia en los últimos años.

El papel proactivo de las administraciones autonómicas (Junta de Andalucía, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Junta de Extremadura) y nacionales (el Miteco en España y el Instituto da Conservação da Natureza e das Florestas de Portugal), así como de entidades no gubernamentales, ha resultado esencial para obtener estos resultados. La financiación europea, a través de varios proyectos Life, también ha contribuido significativamente a la buena marcha del programa.

Papel clave de la cría en cautividad

Además del conjunto de actuaciones de gestión del hábitat y de protección de los linces ante amenazas existentes en el medio natural, el programa de conservación ex situ del lince ibérico ha tenido un papel clave para alcanzar estas cifras positivas. El programa de conservación ex situ, que engloba los trabajos de cría en cautividad y la reintroducción de ejemplares, es fruto de las actuaciones coordinadas en el marco del Memorando de Entendimiento para la aplicación de la Estrategia de Conservación del Lince ibérico en España, suscrito entre el Miteco y las comunidades autónomas de Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura. Portugal también participa activamente en este programa.

Desde que en 2011 comenzaran las primeras sueltas de linces al medio natural de individuos nacidos en cautividad, hasta 2021, se han reintroducido 305 ejemplares, lo que supera las previsiones y expectativas iniciales. Igualmente importante es que la supervivencia y aclimatación observada de los ejemplares reintroducidos en todas las áreas de liberación seleccionadas es elevada

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios