Más de 110.000. Esta cifra no tiene nada que ver con los euros que no le han tocado a Córdoba en el último sorteo de la Lotería, aunque más de 110.000 son los que se sentirán en la provincia de Córdoba cómo si les hubiese tocado esa especie de diosa fortuna el próximo lunes 27 de abril. Se trata de los más de 110.000 menores de entre 0 y 14 años a los que el Gobierno central les permite salir durante un tiempo a la calle cada día. Y

Esta -nunca mejor dicho- pequeña medida es un pequeño paso en la estrategia para la salida en forma desescalonada y gradual del confinamiento al que ha condenado la crisis del coronavirus, y finalmente cumple con las expectativas que los menores se había hecho. Lo que está claro es que el Gobierno alivia algo con ello a las familias y a los propios menores, que llevan en casa desde el mediados del pasado marzo.

Según los últimos datos del padrón arrojados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA), en la provincia de Córdoba esos más de 110.000 menores se reparten entre más de 56.000 niños y en más de 55.000 niñas. En concreto, la franja de 0 a 4 años supone más de 33.500 menores -con más de 17.000 niños y más de 16.500 niñas-; en el caso de los de 5 a 9 años son unos 38.400, de los que unos 19.800 son niños y unos 18.600, niñas; y en caso de los de 10 a 14 años son unos unos 41.000, de los que 21.000 son niños y 20.000, niñas.

La cantidad de menores que podrán salir a la calle el próximo lunes en los distintos 77 municipios de Córdoba tiene que ver obviamente y más o menos porcentualmente con su cantidad de habitantes. En Córdoba capital hay más de 49.000 menores entre los 0 y los 14 años, según los datos del IECA a 1 de enero de este año. A la capital le siguen en cantidad de menores entre esa franja de edad los municipios de Lucena -7.280-,  Palma del Río -3.206-, Montilla -3.080-, Priego de Córdoba -3.055-, Baena -3.012-, Cabra -2.701- y Pozobanco -2.472-. En el polo opuesto están municipios de las comarcas de Los Pedroches y del Valle del Guadiato, que cuentan con menos jóvenes en esa franja de edad. Así, en Santa Eufemia hay 46; en La Granjuela, 43; en El Guijo, 42; en Valsequillo, 38; en Fuente la Lancha, 37; y en Conquista, 22.

Todo ello en un contexto en el que finalmente, los niños sí podrán salir a dar paseos. El Gobierno rectificó a última hora del pasado martes lo que había decidido en el Consejo de Ministros. El modo restrictivo en que podrían salir de casa a partir del 27 de abril había cosechado un aluvión de críticas, tanto de los partidos de la oposición como de algunos socios, como los comunes catalanes. La orden del Gobierno era que los menores de hasta 14 años podrán salir, pero sólo para acompañar a un adulto a las actividades permitidas. Es decir, para "ir a comprar al supermercado, a la farmacia o al banco", según las palabras de la ministra portavoz, María Jesús Montero.

Pero, al final de la tarde, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció que el Gobierno "sabe escuchar", por lo que sí dejará dar paseos bajo determinadas circunstancias. Será Sanidad el Ministerio que las determine, aunque Illa ya adelantó que "dar paseos es dar paseos", y se aplicará a partir del domingo 26 de abril.

"Se trata de una medida improvisada y no del todo acertada", sentencia Jesús Carrasco, del barrio de Levante. "Dejan que los niños vayan a la compra y nadie garantiza que su comportamiento en los supermercados, manipulando incluso alimentos, no suponga tanto el contagio suyo como el de quienes se encuentren en el mismo", añade quien es padre de dos niñas.

"La medida en un principio se había quedado corta; hasta ahora no nos la habían explicado y pensábamos, y ellos, los niños y niñas, también lo pensaban, que sería más amplia, aunque, claro está, preservando la salud de los menores y de las personas que entren en contacto con ello; lo de los paseos está bien" , defiende Sofía Rojas, también del barrio de Levante, y que tiene tres hijos.

Lo que está claro es que en este caso del pequeño paso para la salida del confinamiento que tiene como protagonistas a los menores de entre 0 y 14 años, como en las próximas medidas que vendrán para otros tramos de edad, nunca llueve y nunca lloverá al gusto de todos.