Las niñas nacidas en 1994, que en la provincia de Córdoba son 4.547, comenzaron ayer a recibir cita para la administración de la vacuna contra el papilomavirus, que empezará a realizarse a partir del próximo 15 de septiembre en los centros de atención primaria.

La Consejería de Salud explicó ayer que la vacuna del cáncer de cérvix supone un paso más en la lucha contra el cáncer, aunque advirtió hay que incidir en la necesidad de mantener medidas básicas de prevención y detección precoz de las infecciones genitales como son el uso del preservativo y las citologías periódicas. Además, la Junta destacó que esta vacuna protege sobre dos cepas de virus, que representan el 75% de los más frecuentes que pueden degenerar en un cáncer de cuello de útero.

Con un presupuesto de 12,1 millones de euros, la Consejería planea vacunar a las 45.507 niñas andaluzas con 14 años, de las que 4.547 corresponden a Córdoba; 6.786 a Cádiz; 3.629 a Almería; 5.074 a Granada, 2.738 a Huelva; 4.204 a Jaén; 8.088 a Málaga, y 10.441 a Sevilla.

La Administración autonómica calculó que las nacidas en 1994 habrán terminado de vacunarse en del 2009, año en el que comenzará a administrarse a las niñas nacidas en 1995. Para solicitar una cita, los ciudadanos pueden utilizar los sistemas habituales de Salud Responde (902 505 060) o acudir al centro de salud, donde los funcionarios concretarán día y hora para poner la primera dosis de la vacuna.

En la Comunidad autónoma se registran 7,6 casos de este tipo de cáncer por cada 100.000 mujeres y, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2006 fallecieron 104 mujeres andaluzas debido a esta enfermedad, una cifra muy inferior en comparación a otras partes del mundo, gracias a los programas de cribado existentes.

El programa de detección precoz de cáncer de cérvix establece que las mujeres que presenten factores de riesgo (múltiples parejas, infecciones virales, inmunosupresión...) deben realizarse una citología cada año, mientras que para las que no lo tienen la cadencia de la prueba debe ser anual. Por último, el control citológico en las mujeres con más de 65 años debe incluir dos exámenes normales al año.