Qué importan unas gotas o una intensa lluvia si el objetivo está en demostrar que el vehículo privado debe quedar aparcado para inflar las ruedas de la bici y echarse a la calle. En esto han debido de pensar los centenares de personas que se han echado a la calle con sus vehículos de dos ruedas (y sin motor) para participar en una jornada más del Día de la Bicicleta que este año, por desgracia, se ha visto un pelín alterado por la lluvia.

Y es que aunque las previsiones apuntaban a una cifra de participantes similar a la del año pasado, cuando llegaron a reunirse hasta 8.000 ciclistas, lo cierto es que la intensa lluvia que caía en la mañana de este domingo ha menguado la llegada hasta República Argentina, punto de encuentro del recorrido.

Esto no ha impedido, eso sí, que lo más valientes defensores de las dos ruedas se hayan calzado el chubasquero, enfundado el casco y pedaleado con fuerza (y seguridad, que el suelo estaba resbaladizo) para demostrar que se trata de un vehículo que también se puede utilizar en los días con lluvia. Carlos y Sofía participan desde hace varios años en esta fiesta y desde hace tres se les ha sumado su hijo Simón. Todavía, eso sí, va resguardado del peligro de la carretera en una sillita que su madre lleva en la bici. “Si queremos demostrar que la bicicleta es un vehículo para el día a día también hay que venir con lluvia”, ha defendido Carlos, que ha opinado además que “en otras ciudades europeas la lluvia es el día a día y no por eso se dejan las bicis en casa”.

Participantes en la Fiesta de la Bicicleta.

Y es que un poco de lluvia no puede aguar la Fiesta de la Bicicleta, y más aún en un momento de lucha por el cambio climático en el que desde la calle (sobre todo los más jóvenes) se exigen políticas encaminadas a no romper el planeta aún más de lo que ya lo está. Fabián, de 15 años, tiene esto muy claro y por eso ha participado en esta bicicletada, como también lo hace en cada concentración convocada por Juventud por el clima. “A nosotros ya nos está afectando el cambio climático y vemos las consecuencias, los que vienen detrás las notarán mucho más y mucho peor”, ha defendido este joven antes de montarse en la bici.

También se ha podido ver por allí al alcalde de la ciudad, José María Bellido, aunque sin bici, un vehículo que sí han usado para participar el delegado de Deportes, Manuel Torrejimeno, y la concejala socialista Carmen Victoria Campos.

Autoridades en la Fiesta de la Bicicleta.

Paseo de la Victoria, avenida del Brillante, glorieta Santa Beatriz, avenida Arroyo del Moro y la avenida de Medina Azahara han formado parte de un mojado recorrido donde se han escuchado muchos timbres y pocas bocinas y en el que el trasfondo ha podido con la molesta lluvia.