La batalla contra las parcelaciones ilegales parece estar ganada. Así se desprende, al menos, del balance de actuaciones realizadas el año pasado por la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía adscrita a la Junta, pues los agentes no han realizado ni una nueva imputación por delitos contra la ordenación del territorio en toda la provincia. Según confirmaron fuentes de la Policía Autonómica, durante los últimos 12 meses continuaron las investigaciones para frenar la edificación en la Sierra y en las proximidades de Medina Azahara, si bien no se detectaron hechos que concluyeran en acusaciones. Durante 2006, en cambio, 14 parcelistas fueron imputados por presuntos delitos contra la ordenación del territorio, una cifra que suponía todo un récord y que coincidió con la polvareda levantada por la operación Malaya de Marbella.

Fuentes de la Policía Autonómica explicaron que las investigaciones sobre posibles infracciones urbanísticas se realizan a requerimiento de alguna institución, fundamentalmente a partir de peticiones de la Delegación de Cultura o de la Fiscalía. Y, el año pasado, los agentes cursaron una veintena de inspecciones en toda la provincia y firmaron 15 informes sobre ordenación del territorio. Los resultados, en todos los casos, fueron a favor del medio ambiente y de la conservación del patrimonio histórico.

Este optimismo contrasta, sin embargo, con las observaciones de Ecologistas en Acción, que hace unos días anunció que denunciará varias actuaciones presuntamente ilegales de carácter residencial en las Siete Fincas. Según Ecologistas en Acción, en la zona existen dos accesos en sendas explanadas donde, previsiblemente, "se construirán chalés". El colectivo denunció, además, que ya se ha eliminado matorral y arboleda mediterránea y se han iniciado los movimientos de tierra, aunque mostró su pesimismo por que las denuncias no prosperen. Esto es así porque todas las actuaciones residenciales o viviendas de lujo denunciadas desde 2003 se encuentran acabadas, enlucidas, con suministro de luz y con agua, según Ecologistas.

La jefatura de la Policía Autonómica argumentó que, en el último año, los agentes han trabajado "sobre muchos informes iniciados en 2006", cuando la Junta de Andalucía se afanó en poner coto a las construcciones detectadas junto a la ciudad palatina.

La Policía Autonómica destacó que, durante 2007, los agentes mantuvieron una "línea homogénea" de trabajo en materia de medio ambiente respecto a años anteriores. Los uniformados pusieron 200 denuncias, la mayoría de las cuales -144, el equivalente a un 72 por ciento- se realizó durante el periodo Infoca por imprudencias en la quema de rastrojos o negligencias de prevención. También se denunciaron 39 vertidos y se abrieron cinco expedientes por acampadas si licencia. El desastroso incendio de Cerro Muriano copó la atención de la unidad, que además tuvo que investigar otros 52 fuegos.