Muchas zonas de Andalucía se enfrentan estos días a temperaturas por encima de los 40º C, la primera ola de calor del verano. La vida diaria pueden complicarse estos días, pero afortunadamente existen trucos para hacer que estos días y noches sean algo más llevaderos.

La sombra es tu gran aliada

Aunque esta sea una recomendación que se da todos los años es importante recordarla: en las horas de más calor del día lo recomendado es quedarse en un interior o en una zona de sombra. Y no dar paseos o hacer actividad física en esa franja del día, especialmente si se quiere hacer ejercicio intenso. De esta forma se reducen las posibilidades de sufrir un golpe de calor o problemas de deshidratación.

Bebidas frescas, pero mejor evitar los azúcares

Otra de las recomendaciones habituales es hidratarse bien. Y no todas las bebidas son adecuadas para ello. Desde la OCU recomiendan evitar las bebidas alcohólicas y no abusar de las bebidas azucaradas o que tengan cafeína.

Hielo y ventiladores

Un truco que puede ayudar refrescarse es colocar un cuenco con un poco de agua y hielo a unos 20 o 30 centímetros de las aspas del ventilador. De esta forma se puede enfriar un poco el aire de la habitación, además de aumentar un poco la humedad. Aunque hay que reponer el hielo cada cierto tiempo.

Bolsas de agua fría

Quizás el uso de las bolsas de agua caliente no sea extremadamente popular a día de hoy, pero si tienes una en casa te puede ayudar a pasar menos calor. El truco consiste en llenar la bolsa con agua fría y hielo. Y además puede usarse también para enfriar las sábanas antes de acostarse.

Vaporizadores de agua fría

Y siguiendo con el agua fría, otra buena opción para combatir las altas temperaturas puede ser usar para rellenar un vaporizador ('chufchuf', 'chufi chufi' o cualquiera de los otros nombres que se le han dado al aparato). Con él se puede refrescar una habitación o a una persona. Y para que mantenga el frío entre uso y uso se puede guardar en la nevera.

Cuidado con las duchas

Hay gente que no puede prescindir de una ducha caliente ni siquiera cuando las temperaturas suben. Por otra parte, para algunos las temperaturas animan a darse una buena ducha fría, aunque esto no es lo ideal para refrescarse, porque, aunque funciona su efecto se pasa rápido. Por ello, se puede probar con duchas cortas y con agua templada.

Una dieta adecuada a las temperaturas

Cuando llega el calor apetecen platos refrescantes como el gazpacho, un helado o ensaladas con ingredientes frescos y de temporada. Por otro lado, se recomienda evitar los platos que usen el horno, puesto que es uno de los electrodomésticos que más calor emite cuando están en funcionamiento.

Ventilación cruzada

La ventilación cruzada consiste en abrir dos ventanas que se encuentren en diagonal o en lados contrarios de la casa o habitación. De esta forma se crea una diferencia de presión que genera corrientes de aire, sacando el aire caliente y haciendo que entre aire fresco. Se debe tener una de las ventanas completamente abierta y la otra ligeramente entornada.

Persianas bajadas en las horas de más calor

Otro truco que todo el mundo conoce, pero que no está de más recordar, es el de bajar las persianas y cerrar las ventanas cuando el calor sea más intenso. Esto crea un 'efecto penumbra' que impide que el calor entre. Y si se quiere ventilar la casa lo mejor es hacerlo a primera hora o cuando el sol (y el calor) hayan descendido.

Refresca las partes claves del cuerpo

Aunque el calor afecta al cuerpo por completo, hay algunas zonas concretas del mismo que ayudan a bajar la temperatura corporal si se refrescan. Estas son las muñecas, los pies, los tobillos, los antebrazos, la parte de atrás del cuello y las sienes. Solo se necesita un poco de agua fresca.