Segunda A es un privilegio

"Sería cuestión de sentarnos todos, directiva, jugadores, afición y medios de comunicación, para tratar de encontrar una solución. Pero lo cierto es que en los 50 años de historia del club no ha habido una línea regular que le permitiera estar donde se merece, que es en Primera División. Está claro que todos los directores deportivos, entrenadores y jugadores que hemos pasado por aquí no vamos a ser malos. Es una cuestión para reflexionar". Esta respuesta de Emilio Vega en una entrevista concedida a El Día llevó a Cordobamanía a organizar una mesa redonda a la que ayer acudieron el presidente blanquiverde, Rafael Campanero; el director deportivo, José Javier Zubillaga; y el capitán, Alessandro Pierini. Ellos tres -el entrenador, Juan Luna Eslava, no asistió finalmente-, junto a aficionados y periodistas reunidos en Fátima, repasaron con espíritu constructivo los pormenores de un asunto con mil aristas. Durante dos horas fue abordado el pasado, el presente y el futuro del club. Y se extrajeron conclusiones.

El Córdoba no milita en Primera desde 1972. Según Campanero, "la diferencia entre aquella época y ésta es enorme. El fútbol ha evolucionado y es totalmente distinto". A su juicio, "hemos tenido muchos errores, pero hay tantos porque no hay continuidad". El presidente matizó que "parece que esos 37 años son nuestra culpa. Hoy en día, estar en Segunda A es un privilegio". Y recordó que el año pasado subió el que menos presupuesto tenía, el Numancia, y que el Xerez, líder actual, acusa la crisis económica.

Pierini señaló que "en esos 37 años han faltado cosas. Pero en estos cinco años el Córdoba está en un camino complicado. Se cometieron errores pasados que yo no recuerdo, pero el aficionado medio los ve reflejados en esos 37 años". El italiano considera que "Córdoba puede ser un paraíso futbolístico, porque hay potencial: afición, ciudad... Cosas que por ejemplo en Éibar o en Salamanca no se dan". "Estar mal económicamente no es igual a estar mal en la clasificación. Esa ecuación no es exacta, pero el aficionado no ve eso. Eso es también lo bonito del fútbol", agregó.

Zubillaga puso el dedo en la llaga: "Aquí en Córdoba ha habido un perfil de mecenas que no sé si es bueno o malo. En otros sitios se han apretado el cinturón. Esa persona -en alusión a Rafael Gomez- desvirtuó la realidad. El futbolista tiene un valor y un precio". "Lo importante debe ser tener un patrimonio, y el Córdoba no tiene ningún activo salvo la afición", puntualizó.

Campanero es consciente de que "el Córdoba puede dar más de sí. Nosotros no hemos acertado porque la Segunda es muy difícil. Los profesionales deben marcar el camino y los consejeros, analizar gastos e ingresos y decir éste es el presupuesto: saca lo mejor. El presidente debe estar alejado de los fichajes. En la cantera también habremos hecho algo mal, porque no sale ni un jugador. El profesional que venga, que lo tengo ya en la cabeza, debe saber que tenemos un futuro, aunque lo vamos a pasar mal por la crisis". "Aquí se han puesto muchos millones y no tenemos ni una cuna para acostar a un niño", insistió.

Centrado en el presente, Pierini esgrimió que "si estamos con 40 puntos, es porque nos lo merecemos. Pero podemos dar más". El capitán dio un toque de atención a su gremio: "Los futbolistas debemos cambiar. Querer más, no conformarnos". Él, curtido en la cultura del esfuerzo de su Italia natal, aboga por "tener más pasión por el trabajo, querer mejorar cada día más. Eso les falta también a los chavales de la cantera. He visto jugadores que por calidad podrían ser futbolistas del Córdoba en Segunda, pero les falta competitividad".

Para Campanero, "no vale para nada la Tercera". Zubillaga expuso que su "ideología de la cantera es hacer futbolistas, no ganar campeonatos". Y Pierini puso la guinda: "El Córdoba no tiene la presión de ganar una Liga, y es el lugar ideal para formar jugadores".