Después de que ya sea una realidad el tan demandado almacenamiento privado para estabilizar los precios del aceite de oliva en España –autorizado de forma extraordinaria por la Unión Europea (UE)–, el ministro de Agricultura en funciones, Luis Planas, –quien llevó a cabo las negociaciones para dicho almacenamiento– ha anunciado que llevará al Consejo de Ministros un decreto “un decreto en materia de calidad y trazabilidad del aceite de oliva”, decreto que el Ejecutivo pretende aprobar con el apoyo del sector.

Planas ha insistido en que el decreto supondrá “asegurar a los consumidores que, de una forma homogénea, aquello que compran tiene las características que se indican en la etiqueta, lo cual ocurre siempre, pero ahora desde el Gobierno se le quiere dar una mayor solidez”. Según el ministro, ese documento incidirá respecto a la trazabilidad en que, en el caso de “las posibles mezclas y demás, deben efectuarse con total transparencia para que el consumidor sepa exactamente lo que consume”.

Planas ha puntualizado la aprobación de ese decreto beneficia al propio sector y, especialmente, a los consumidores, “a los que se les dará mayor seguridad sobre lo que compran y así se fomentá además el consumo del aceite de oliva”.

Planas ha puntualizado que, además de en el decreto, el Ministerio de Agricultura también trabaja de la mano del sector en aspectos como “la promoción y la apertura de nuevos mercados, algo que hace muy necesario, dado que en España estamos ya muy cerca de los dos millones de toneladas de producción, teniendo en cuenta que “este año tuvimos una cosecha récord de casi 1,8 millones de toneladas, y necesitamos venderlas”.

El ministro de Agricultura en funciones ha insistido en que “necesitamos vender mucho para que no se produzca una caída de precios, como ya se está haciendo con campañas, junto a la Interprofesional del Aceite de Oliva, para la promoción del consumo en España, en otros países de la Unión Europea y también en América y Asia, donde tenemos que abrir nuevos mercados”. Planas ha hablado asimismo de la necesidad de recurrir a la “autorregulación, para lograr de forma estable que ese tobogán de la oferta y demanda, que determina los precios, se estabilice de algún modo”, es decir, para para controlar en cierta medida el precio del aceite en origen y que le resulte rentable al olivarero.

“Para eso estamos trabajando con Cooperativas Agroalimentarias y con la Comisión Europea y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, para lograr un mecanismo técnico que permita estabilizar el sector del aceite de oliva”, ha insistido.

También se ha referido al almacenamiento privado del aceite de oliva insistiendo en que que se harán cuatro licitaciones para ese almacenamiento, “entre finales de este mes de noviembre y febrero de 2020. “El almacenemianto privado debe permitir encauzar el tránsito entre la campaña 2018/19 y la de 2019/20, teniendo en cuenta que tenemos en este momento 755.300 toneladas de stock de enlace entre ambas campañas. Si queremos empezar a recuperar los precios en origen del aceite de oliva, esta medida de almacenamiento por 180 días, tanto del virgen extra y el virgen, como del lampante, debe suponer un acicate importante”, ha apuntado.

Planas además ha defendido en que en relación al aceite de oliva “hay que mirar más allá, desde el punto de vista de la próxima Política Agraria Común (PAC) y del apoyo a nuestro olivar tradicional, al olivar en pendiente y a todo aquel que tiene unos costes de producción suplementarios respecto al olivar intensivo, pues, al margen del ámbito productivo, son también importantes desde el punto de vista medioambiental y necesitan un apoyo específico de la PAC”.