Tribuna
Raquel Montenegro
Lo que esconden los despachos
No sé explicarlo, y no es que me haya pasado nada malo, pero que he tenido una semana rara, o rarilla, que yo no sé por qué, que habrá sido por las lluvias, por el frío, por lo que sea, pero que no ha sido mi mejor semana. Pero ya la tengo olvidada, porque ahora empieza una semana de las muy buenas, y hay que estar a tope.
El otro día leí una cosa en mi Día que me dejó un poco choqueado, y es que donde más solos se sienten las personas mayores es en Córdoba. Y eso me hizo pensar mucho, la verdad. Yo no es que sea muy mayor, que soy mayor a secas, pero espero serlo algún día, y no me gustaría verme como algunas de las personas que leí en este periódico. Antes no pensaba en estas cosas, la verdad, pero cada vez se me asoman más a la cabeza y es normal que pase, como le pasa a todo el mundo, me parece a mí.
Yo ahora, por estas fechas, me acuerdo mucho de estas personas, porque por Navidad es cuando más echamos de menos a los que no están, y si encima estás solo estos malos ratos son todavía más malos, y yo creo que me estoy explicando. Por eso yo creo que es bueno todo lo que se pueda hacer, que nadie se merece pasar por estos tragos, sobre todo cuando hay gente que no quiere estar sola. Otra cosa es que quieras estar solo por gusto, que de todo hay, y todo es muy respetable, por supuesto, aunque no lo entendamos. Esa ya es otra historia.
Donde hubo poca historia fue en el campo del Leganés, la verdad, que aunque sumamos otro puntito, no jugamos a nada, pero a nada, y encima fallamos un penalti, que vaya trallazo le pegó Jacobo al larguero. Hay sido un mal noviembre para nuestro equipo, la verdad, que de vernos tan arriba ahora estamos mirando de reojo a los de abajo.
Espero que no lleguemos a esa zona peligrosa en la que nos entran los nervios y empezamos a hacerlo todo regular. Yo, la verdad, es que lo veo jugar y tengo la impresión de que le falta algo al equipo, algo, alguien en el medio del campo que piense lo que hay que hacer. Seguro que me entienden, que no hablo tan raro. En fin, que solo espero que sea un buen diciembre, para nuestro Córdoba, aunque ayer empató otra vez con el Eibar, y para todos nosotros, que es lo que nos merecemos. Hasta la semana que viene.
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