De / Jesús Cabrera / Jcabrera@ Eldiadecordoba.com

Humor rumano

el fuste

AUNQUE no lo parezca, los rumanos también tienen su punto a la hora de hacer reír. No podemos mirarnos tanto el ombligo y pensar que la esencia de la gracia se condensa en Andalucía, porque cuando en otros sitios se ponen a ello nos sacan la delantera. En este caso, los legisladores han redactado un nuevo Código Civil que pone fin a las humoradas que se gastaban los padres a la hora de decidir el nombre de sus vástagos. El artículo 84.2 prohibe el registro de nombres como Hitler, Basura o Pezón, algo que complicará la vida del bebé. El buen gusto no debería formar parte de las leyes sino del criterio de cada uno, pero cuando éste se pierde hay que meterlo en el articulado del Código Civil. Así, el estado -ya que los padres no quieren- garantiza que las personas tendrán una vida sin ridiculizaciones porque se les ocurrió ponerles nombres como Paracetamol, Monamour, Semáforo, Culo o Cojón.

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