Producto del trabajo realizado durante su estancia en Cuba tras la concesión de la beca Córdoba Artes Nobles, otorgada por el Ayuntamiento de Córdoba y Todisa, Ángel García Roldán (Córdoba, 1972) presenta Return to paradise en la galería Arte21.

Dentro de las exposiciones que se han organizado con motivo de la celebración de Cosmopoética, la galería Arte21 en su decidido y constante apoyo a los artistas jóvenes de la ciudad ha querido presentar estos nuevos trabajos de Ángel García Roldán, parte de un amplio proyecto que bajo el título de Anomia ha venido desarrollando desde 2006 hasta la actualidad y del que casi sólo hemos podido ver una tercera parte.

Artista nacido en esta ciudad y vinculado a ella en numerosas ocasiones por proyectos como Dmencia, El vuelo de Hypnos, intervenciones en la Judería o La memoria de los vivos en el Museo Arqueológico, así como exposiciones individuales como Afterword en la ya extinta galería Cobalto, Ángel García Roldán ha perseguido desde sus comienzos en la pintura hasta las instalaciones, la fotografía y el vídeo (territorios predilectos en estos últimos años) una búsqueda por el origen y el mito, por aquello que del pasado nos queda en el presente tal y como ya dejó patente en la serie pictórica A kiss from Nínive o en sus conocidas instalaciones y esculturas realizadas con bolsas de té.

En la serie de trabajos que ahora presenta en la galería Arte21 vídeo y fotografía le sirven para reflexionar una vez más sobre el paraíso perdido en piezas de gran rotundidad como la trilogía videográfica Dogma (Convertirse en un mártir, Ojos que no ven corazón que no siente y La anónima lucha del hombre invisible) con ecos performáticos de los años setenta (Nauman, Abramovic..), la impresionante pieza de vídeo Cerdos en la que subvierte el documental para acercarnos a una lectura política foucaltiana sobre la libertad y la represión o el eterno circulo de De sal.

Junto a estas tres piezas de vídeo, García Roldán presenta la serie fotográfica Balseros, La comunidad (idílica visión de la joie de vivre en Cuba) y el políptico y díptico que lleva por rotundo título O triunfa o moriremos todos. Su estancia en Cuba ha sido fructífera a la hora de replantear cuestiones que estaban ya en su trabajo desde los inicios, pero es ahora, y en el lenguaje fotográfico y videográfico donde Ángel García Roldán ha encontrado el camino que le convierte en uno de las trayectorias a seguir dentro del arte español contemporáneo.