Córdoba se volvió de vacío en el Campeonato de España de pista cubierta, celebrado el pasado fin de semana en Valencia. En el velódromo Luis Puig se notaron, y mucho, las ausencias de Belén Recio y Juan Ramón Barraza.

En la velocidad se evidenció un gran vacío, a pesar de la participación de dos representantes cordobesas: la lucentina Araceli López y la joven Aránzazu Vega. Ambas se quedaron sin opciones en las tandas de clasificación. López consiguió su mejor marca personal con 25.81 en 200, aunque sólo le sirvió para ser tercera en su serie, quedando muy lejos de los registros punteros. Por su parte, Vega fue cuarta en su serie con un tiempo de 25.57, lejos de los 24 segundos imprescindibles para estar en una final. Tampoco tuvieron opciones de entrar en los 60 lisos, donde los pocos puestos de clasificación fueron para las elegidas. Entre ellas figuraba una antigua atleta del Diputación, Amparo Cotán, quien finalizó segunda con 7.54.

En triple, José Antonio Copé terminó en el puesto decimotercero de la general con un registro muy corto (14,33), lejos de sus 15,09. La pista cubierta no se le da bien al integrante del Bahía.

Cristina López (Nerja) se quedó en los clasificatorios del 60 vallas con 9.26, una marca que no le permitió el pase a la semifinal. Su hermano Javier concluyó séptimo con 8.27, al tiempo que Alejandro Navarro (Diputación) fue sexto, parando el crono en 8.20.

La espectacular bajada de buenos registros se ha dejado notar este año en el Campeonato de España, pues los atletas estaban más pendientes de buscar el pasaporte a los Juegos Olímpicos de Pekín. De esta forma, ha sido un año de transición para la pista cubierta. Eso sí, el atletismo español puso a prueba las instalaciones que albergarán los Mundiales en sala del 7 al 9 de marzo.