Al Córdoba no le hizo falta ofrecer su mejor versión para doblegar a un rival directo por el ascenso. Sin Fuentes, lesionado en Riazor, Paco Jémez realizó un solo cambio en el once con respecto al 2-0 en el campo del líder para recuperar el sistema táctico 4-4-2 en detrimento del 4-1-4-1: Airam Cabrera acompañó a Charles en la delantera y Dubarbier retrasó su posición en la izquierda para ejercer como lateral. En el Hércules, las sanciones del central Mora y el lateral zurdo Peña, así como las lesiones de Juanra y Sergio Díaz, obligaron a Juan Carlos Mandiá a improvisar en el costado siniestro de la retaguardia de su 4-2-3-1: Sergio Alejandro entró en el eje y el canterano Sellés, de apenas 18 años y con experiencia en alguna convocatoria de la selección española sub 19, abandonó su habitual desempeño en la Regional Preferente para debutar en la Liga Adelante. El CCF, muy intenso en la presión en todas las zonas del campo, endosó tres tantos al equipo con el que compartía el cartel de menos goleado de la categoría y sólo encajó uno, el castigo a dejarse llevar en el segundo tiempo. Tras abrir brecha con una de las múltiples coladas por las bandas y una genialidad de López Silva al filo del descanso, el conjunto blanquiverde remató la faena y de paso se llevó el punto extra del gol average particular cuando David Prieto resolvió el barullo provocado por una falta lateral regresó de los vestuarios.

Defensa

Con Gaspar en el dique seco y Tena en el banquillo, Ximo Navarro repitió como central por tercera jornada consecutiva y exhibió su velocidad y su garra formando una sólida pareja con David Prieto, mientras que Fernández y Dubarbier, muy verticales, fueron los laterales. Por delante, titánico, López Garai dio la enésima lección. Y no faltó el generoso auxilio de los encargados de decidir en ataque, que maniataron al Hércules apretando en el campo contrario. Por eso hubo muchos pelotazos de los visitantes, sobre todo en el primer periodo.

El cuadro alicantino trató de crear peligro recuperando arriba y trenzando a través de sus atacantes, bien dotados técnicamente, y así llegó su gol, ya en el 80'. Los blanquiazules llevaban muchos minutos asomándose por las inmediaciones del área, aunque sin profundidad, cuando Felipe Sanchón, Míchel y Gilvan Gomes se asociaron de manera fulgurante para estrechar el luminoso. Ni Tote ni Carlos Calvo habían desequilibrado a pie cambiado y los cambios dieron vidilla al combinado de Mandiá, quien movió ficha sin encontrar la recompensa en forma de empate. Porque enseguida cayó el 3-1… en una acción a balón parado, uno de sus fuertes.

ataque

Como en Villarreal, Charles y Airam fueron la dupla en la vanguardia. El Córdoba mantuvo en todo momento el 4-4-2, achuchó con las líneas muy adelantadas y sacó provecho de las dudas del Hércules, metiéndole el miedo el cuerpo con infinidad de apariciones por las alas de los interiores y los laterales. Así se fraguó el 1-0, gracias a una cabalgada de Dubarbier, y el 2-0, con centro de Borja García y golazo de López Silva -el madrileño y el onubense también crearon muchos problemas con sus diagonales por dentro-. Y por si fuera poco, y para evitar la zozobra en la recta final del choque, ayer cuajó incluso una falta lateral, pues la fortuna dejó el cuero en las inmediaciones de David Prieto para que el central diera la puntilla.

El CCF percutió contra Sergio Alejandro y Sellés, nada compenetrados, y doblegó la resistencia de Diego Rivas, un pivote siempre cumplidor. Con mucho toque y mucha paciencia, el equipo de Paco buscó las rendijas ante un bloque pertrechado en 50 metros, que no dejaba jugar desde atrás pero sólo presionaba en la zona de tres cuartos. De vez en cuando, David Prieto sorprendía con algún envío en largo hacia Cabrera, que cayó en tres fueras de juego y rozó el gol tras una ruptura de Fernández.

El atasco en la zona ancha propició imprecisiones, pero el Córdoba se las ingenió para encontrar huecos abriendo el campo. Faltó una marcha más en las transiciones y mayor tino en los centros para golear a un equipo prácticamente entregado, que basculaba mal y estuvo a punto de encajar el 3-0 en sendas ocasiones de Borja con Arbilla atendido en la banda.

virtudes

Consciente de su superioridad futbolística, el Córdoba fue a por el Hércules. Y se quedó la victoria y el goal average prácticamente jugando a medio gas.

talón de aquiles

La fase adormecida de la segunda mitad permitió al rival meterse en el partido.