Sin llegar a ejercer ese papel de dominador que muchos esperaban en su retorno a Segunda B, el Córdoba CF se viene manejando bien en las acciones sin balón. No en vano, tras 23 jornadas de competición, los jugadores blanquiverdes apenas acumulan 59 cartulinas amarillas, y sólo tres se han perdido algún partido por sanción: los ya ausentes Owusu y Fernández, y más recientemente el capitán Javi Flores.

Ante un momento clave de la temporada, con partidos ante rivales directos como el Badajoz, el Cartagena o el San Fernando en las próximas cinco semanas, saber manejar esa amenaza puede resultar determinante. Raúl Agné ya protegió en Murcia a Jesús Álvaro para no perderlo para la cita ante el Yeclano, lo que mantiene al lateral zurdo en la nómina de apercibidos que completan Raúl Cámara, Djetei e Imanol García. Todos, a excepción del lateral diestro, fijos en los esquemas del técnico aragonés.

Un paso por detrás, con tres amonestaciones en su cuenta, el cuadro cordobesista tiene hasta seis futbolistas. A Chus Herrero, Isaac Becerra y Xavi Molina hay que sumar a Carlos Valverde y Federico Piovaccari. Estos dos últimos fueron los únicos que vieron la amarilla el pasado fin de semana, en el caso del italiano en su (re)estreno con el Córdoba. Pero ambos arrastraban dos de lo que va campeonato, tras jugar la primera parte del curso con el Extremadura y el Rayo Vallecano, respectivamente.

También está con tres Iván Robles, otro de los refuerzos invernales llevados a cabo por la dirección deportiva blanquiverde, tras su paso por el Cádiz B. De los otros tres fichajes, Willy ha llegado con dos del Extremadura, las mismas que Jordi Tur del filial cadista. Desde cero parte Thierry Moutinho, ahora lesionado y baja segura en el Nuevo Vivero, dado que su incorporación ha sido desde el Steaua de Bucarest rumano.