El Córdoba CF solventó sin mayores apuros su primer amistoso en Bahréin, ante un Al Khalidiya inferior técnica y tácticamente y al que el fuelle físico apenas le duró una parte. En un encuentro dominado por los blanquiverdes en todo momento, lo peor fue sin duda el doble percance físico sufrido por los blanquiverdes con Felipe Ramos y José Alonso como protagonistas, y especialmente preocupante en el caso del central, que se marchó con problemas musculares que pueden dejarle fuera del equipo varias semanas.

Después de varias sesiones de entrenamiento en la concentración del equipo en Bahréin, Germán Crespo afrontó el primero de los dos amistosos que disputarán los blanquiverdes con un once inicial bastante reconocible, reservando apenas al tocado Willy y apostando por los veteranos, quizás con la idea de dejar una grata imagen ante los propietarios de la entidad.

El Córdoba no tardó demasiado en plasmar su superioridad sobre el tercer clasificado de la máxima categoría del fútbol bahreiní, un Al Khalidiya voluntarioso pero tremendamente deficiente en cuando a la táctica se refiere, que dio todas las facilidades para que los cordobesistas jugaran a placer. Nada más arrancar el duelo, De las Cuevas recibió en la zona de la mediapunta y filtró un balón entre los centrales que Casas desperdició con un derechazo que se perdió alto.

El rambleño se quitó la espina poco despuñes, en el minuto 7, sorprendiendo a Lutfalla con un trallazo nada más recibir el balón, de nuevo asistido por De las Cuevas, que se coló en la meta del Al Khalidiya sin que su portero pudiese evitarlo. En esos primeros compases, el CCF dispuso de varios oportunidades más, con De las Cuevas y Simo muy cómodos jugando entre líneas ante un rival incapaz de apretar lo suficiente para incomodar a los jugadores de calidad del cuadro blanquiverde.

Pese al dominio claro en el juego de los de Germán Crespo, el ritmo del partido decayó pronto y el Córdoba se contagió de las imprecisiones de su rival para terminar pagando caro un exceso de relajación que le llevó a perder la pelota en fase de iniciación del juego. Rabia disparó a bocajarro ante Felipe Ramos y el rechazo lo empujó a gol Abdullatif. La acción, más allá del gol, resultó desgraciada porque en el choque con el delantero bahreiní Felipe Ramos recibió un fuerte golpe en el costado que le obligó a ser sustituido.

Puga intenta zafarse de Rabia, delantero del Al Khalidiya.

Ese contratiempo hizo que los jugadores blanquiverdes se tomaran el choque con más calma, sabedores de que la prioridad era evitar sustos en el aspecto físico. Pese a ello, una marcha menos le siguió bastando al Córdoba para hacer correr al Al Khalidiya, que en los últimos minutos de la primera parte acusaba ya de manera visible el cansancio. Antes del asueto, Luismi remató de primeras un centro de De las Cuevas desde la derecha pero no encontró portería.

El mediapunta alicantino del conjunto blanquiverde fue protagonista de la primera acción de la segunda parte. Sin que todavía se hubieran asentado en el césped los muchos cambios del cuadro local en el intermedio, De las Cuevas recibió en el área un buen servicio de Casas tras un fallo en la zaga del Al Khalidiya y el alicantino puso el balón ajustado al palo superando al meta bahreiní para adelantar de nuevo a su equipo.

Alonso cae lesionado

El partido estaba de nuevo donde el Córdoba lo quería, pero la fatalidad volvió a golpear a los blanquiverdes. Una acción sin aparente complicación acabó con José Alonso pidiendo el cambio y llevándose la mano al muslo. El central, recién salido de una lesión en esa zona, se marchó del terreno de juego visiblemente afectado, lo que hace augurar una recaída que le impedirá estar disponible en el regreso a la competición oficial.

Con dos lesionados ya en apenas una hora de juego, al Córdoba se le terminaron por apagar las ganas de arriesgar lo más mínimo. El cuadro local pudo empatar en un cabezazo de Alhussani que Carlos Marín sacó con una gran estirada. En la siguiente jugada, Adrián Fuentes no acertó a superar a Lutfalla después de una rápida contra conducida por Julio Iglesias. El conjunto blanquiverde era tremendamente superior y poco tardó Casas en demostrarlo, poniendo tierra de por medio con un libre directo que se coló por debajo de la barrera local.

Con el 1-3, el choque entró ya en un tramo final de bajo ritmo y tregua entre ambos equipos, para cerrar sin más percances un amistoso histórico por lo que para el Córdoba supone este viaje a Bahréin, pero que en corto plazo deja dos percances físicos preocupantes.