Los futbolistas del Córdoba no estuvieron solos en la sesión vespertina que el equipo llevó a cabo ayer en la Ciudad Deportiva del Camino Carbonell. Más de un centenar de aficionados se acercaron para presenciar el trabajo de los hombres de Jorge Romero y arropar al equipo en una semana especial, en la que los entrenamientos se están llevando a cabo a puerta abierta, permitiendo así que muchos escolares que se encuentran de vacaciones puedan acercarse a sus ídolos.
A la iniciativa lanzada por el colectivo de Brigadas Blanquiverdes se sumaron bastantes aficionados que dieron color a la sesión de tarde y que mostraron el total apoyo a la plantilla y el cuerpo técnico actual, a pesar de la delicada situación que atraviesa el Córdoba en la clasificación.
Además, la visita a las instalaciones del Camino Carbonell era una excusa perfecta para apoyar la causa solidaria promovida por el citado colectivo, que recogió juguetes para donarlos posteriormente a una asociación que se encargará de que los pequeños más necesitados disfruten de un presente en días tan especiales como los que se avecinan. La convivencia entre jugadores y afición fue cordial y cercana.
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