El paro subió en Córdoba el pasado mes de febrero en 1.754 personas, un incremento propiciado, sobre todo, por el fin de la campaña de la aceituna y también por la de la naranja. Según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en la provincia había el mes pasado 83.265 desempleados, un 2,15% más que en enero.

Ese dato sitúa a febrero de 2021 como el peor mes de febrero en un lustro. Para encontrar una cifra más alta de desempleados habría que irse hasta 2016, con casi 89.500 personas sin trabajo. La comparativa anual, que permite dar una perspectiva más amplia, habla de una subida del desempleo de un 16%.

Es decir, en febrero de este año había en Córdoba 11.482 parados más que en febrero de 2020. Aquí el análisis ya no sería tan estacional como puede ser achacar estas subidas a una campaña agrícola concreta, sino que hay que tener en cuenta, obviamente, la crisis económica derivada del coronavirus.

En este caso, de las 83.265 personas paradas que había en Córdoba en febrero, más de 49.400 eran mujeres, más del 59%. Y 8.652 eran jóvenes de menos de 25 años.

Sectores

Por sectores, los servicios volvieron a acumular la mayor parte de los parados, siendo el ámbito en el que se emplea gran parte de la población activa cordobesa. Según los datos del Gobierno, los servicios acumularon durante febrero 51.171 desempleados, la agricultura acaparó 9.488, la industria, 7.031 y la construcción, 6.438.

Las diferencias con respecto a enero permiten observar que el sector donde más creció el paro fue en la agricultura, debido a esa finalización de la campaña de la aceituna. Concretamente, el campo tenía en febrero 1.317 parados más que en enero, mientras que lo servicios sumaron 304 desempleados más.

Los otros dos sectores tuvieron un comportamiento muy diferente. Y es que la industria apenas sumó dos parados más y la construcción incluso consiguió que el paro descendiera, concretamente, en 132 personas.

Contratación

En cuanto a los contratos, se firmaron 41.196, un 13% menos que en enero y un 2,12% menos que en febrero de 2020. En este caso, la diferencia con enero fue de 6.170 contratos menos y 892 menos que un año antes.

Por sacar un dato positivo, se consiguieron firmar más contratos indefinidos que en enero, 49 más (una subida del 3,86%). Aún así, este modelo de contratación, que es la que genera un empleo de más calidad, sigue siendo anecdótica.

De los casi 41.200 contratos que se firmaron en Córdoba en febrero de este año, solo 1.320 eran indefinidos, por 39.876 que fueron temporales. Es decir, que el porcentaje es de 2,93% frente a un 97,07%. 

Y la mayor parte de esos contratos se firmaron en el campo, hasta 26.516, por los 9.565 del sector servicios, los 2.760 de la construcción y los 2.355 de la industria.

Reacciones 

El secretario de Formación y Empleo de UGT Córdoba, Manuel Torralba, ha destacado que “a medida que nos acercamos al aniversario de la declaración de la pandemia nos damos cuenta de la magnitud de las cifras que manejamos en el número de personas desempleadas (11.482)”. Un dato que resulta aún más alarmante, según detalla, cuando se sabe que en esos datos “no se contabilizan las personas que están acogidas a ERTE”. El responsable del área de Empleo del sindicato cree que hay que hacer especial hincapié en la tasa de paro de las mujeres en la provincia, “que es un 15% mayor que el de los hombres lo que hace, sin duda, ahondar más en la herida de la desigualdad en nuestra sociedad, donde hablar de aspectos como la conciliación y la igualdad de oportunidades es clamar en el desierto de la injusticia”.

Para Torralba, la nota positiva del mes de febrero ha sido el anuncio de que la Base Logística del Ejército se instalará en la provincia, lo que “en un plazo medio debe paliar parte de nuestro déficit de empleo estable, ya que prevemos que los empleos que allí se creen sean estables y no estacionarios”. Además, para responsable del área de Empleo del sindicato este hecho puede suponer “la primera piedra para el cambio de modelo productivo en nuestra provincia, generando una oportunidad para poner en valorinfraestructuras como el aeropuerto que están siendo infrautilizadas”. A pesar de todo, mientras se desarrolla este proyecto, lo que tenemos es “más de lo mismo, por lo que seguiremos hundiéndonos en el pozo de la pobreza y la desesperación de las personas”, ha concluido.

“Mientras sigamos dependiendo fundamentalmente del sector agrícola y del sector servicios, el empleo en la provincia de Córdoba va a seguir siendo hipervulnerable a las crisis que se vayan produciendo porque tienen poca capacidad de reacción”, ha señalado el secretario de Empleo de CCOO de Córdoba, Manuel Merino, tras conocer los datos del paro de febrero. 

Merino ha lamentado la subida que, sin embargo, “era esperada debido al mantenimiento de las restricciones que afectan al sector hostelero y a que las campañas de la aceituna y los cítricos van tocando a su fin". “La subida del paro agrícola ha sido muy importante y sin embargo este sector ha copado la contratación en febrero con 26.516 de los 41.196 contratos registrados, es decir, el 64,36%”, ha apuntado el responsable sindical de CCOO, quien ha remarcado que esta dependencia de un sector en el que la contratación es estacional y temporal “nos hace muy vulnerables a los vaivenes económicos”. “En los dos primeros meses del año la tasa de temporalidad se ha situado en el 97,07%. Con estas cifras de temporalidad es imposible que las familias hagan planes a medio y largo plazo. La temporalidad está restringiendo el consumo interno y con ello reduciendo las posibilidades de crecimiento de las empresas locales, lo que unido a los bajos sueldos hace el cóctel perfecto para que Córdoba se quede estancada”, ha apuntado Merino.