Decenas de niños dieron ayer la bienvenida al invierno en la estación de tren de la capital con una gran fiesta destinada única y exclusivamente a ellos. Las chiquifiestas de la estación se han convertido ya en toda una tradición y los más pequeños ya que disfrutan de cuentacuetnos, talleres de globoflexia, títeres, payasos, juegos y muchos regalos. Así, familias enteras se desplazaron hasta la glorieta de las Tres Culturas para pasar una mañana divertida. La espera para tomar el tren fue algo más amena en la jornada de ayer.

La mañana comenzó con una bonita historia en la que a un niño le robaban la imaginación y tenía que recuperarla. Los chavales escucharon atentos hasta conocer el desenlace del cuento. Chucho y Maleta, junto con los seres mágicos del Bosque de la Ilusión, lucharon contra el malvado brujo de la Consola para liberar toda la imaginación que les había quitado a los niños. "Ha tenido que hacer un largo viaje para recuperarla" contaba María, que había estado muy pendiente del relato. Mientras, su hermana Sara participaba en el taller de pintura, donde dos animadores le adornaban la cara con diferentes motivos. "Yo quiere que me pintes como una princesa", le decía Lucía a la chica.

La mascota de las chiquifiestas estuvo toda la mañana repartiendo caramelos a los pequeños y regalos. Cuadernos, lápices, globos, camisetas y unas pegatinas que deben coleccionar para conseguir más premios. Y es que estas fiestas se celebran en el inicio de cada estación del año: primavera, verano, otoño e invierno. Si los niños consiguen reunir todos los adhesivos de cada uno de los espectáculos reciben un regalo final como recompensa.

El objetivo de estas actividades es promocionar las tiendas de la estación, ya que los padres pueden ir a comprar mientras sus hijos juegan. Además "pretendemos transmitir valores positivos entre los más pequeños y concienciarlos de que la verdadera felicidad no reside en el número de juguetes que tengan, sino en compartir, jugar y reír con otros niños", según explicó ayer una de las responsables del evento que organiza el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).

Los padres también estuvieron muy contentos por esta iniciativa ya que les permitió pasar un domingo distinto con los pequeños y dejar las prisas que tradicionalmente acompañan a la estación para relajarse pasar un día en familia. Algunos aprovecharon para organizar el próximo viaje de una Navidad que ya está a las puertas.