Un total de 57 vehículos dedicados al transporte escolar y de menores han sido controlados durante la campaña especial de vigilancia que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha realizado entre el 3 y el 7 de febrero en Córdoba para comprobar que los vehículos dedicados a este tipo de transporte cumplen la normativa establecida.

La Subdelegación del Gobierno ha informado de que en este tiempo los agentes han denunciado a 38 vehículos (66,67% del total) de los 57 vehículos controlados que se dedican a este tipo de transporte.

Durante los cinco días de duración de la campaña, los agentes han comprobando que las autorizaciones y documentos que deben tener estos vehículos sean los correctos para la prestación del servicio. Asimismo, los agentes han verificado que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción o los tiempos de conducción y descanso.

En esta campaña, según la misma información, ningún conductor ha dado positivo ni en la prueba de alcoholemia ni en la de drogas y, además, ninguno de los vehículos ha sido denunciado por exceso de velocidad.

La Subdelegación ha señalado también durante la campaña se ha prestado especial atención al uso de los cinturones de seguridad en aquellos autobuses escolares que los lleven instalados. Así, se ha constatado que tan solo uno de los 38 autobuses denunciados (2,63% del total) carecían o no hacían uso del cinturón. Según diversos estudios el uso de un sistema de seguridad en autobuses reduciría las lesiones mortales en un 90% en caso de choque frontal o vuelco, ya que correctamente abrochado evita la proyección del pasajero (adulto o niño) y reduce los impactos en el pecho, abdomen y piernas. Desde octubre de 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no lleve instalados estos sistemas de retención.

Las irregularidades administrativas, por su parte, son las que mayor número de denuncias han generado. Así, no disponer de la autorización especial para realizar transporte escolar ha supuesto la denuncia a 20 vehículos, el 35,09% del total de los vehículos controlados. No tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitado, como exige la ley, ha dado lugar a 10 denuncias (17,54%).

Otro de los datos que ha aportado la Subdelegación del Gobierno es que cuatro de los vehículos controlados (el 7,02%) no llevaban la señal de transporte escolar (V-10), obligatoria cuando se realiza este tipo de transporte.

Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil también han comprobado que 12 vehículos de transporte escolar (el 21,05%) presentaban deficiencias en las puertas de servicio y emergencias, así como en sus dispositivos de accionamiento.

El estado de los vehículos es un factor muy importante en el transporte escolar y, en este caso, ningún vehículo circulaba sin la Inspección Técnica en vigor (ITV).

Por último, en lo que se refiere al exceso de tiempo de conducción o minoración del descanso, ningún conductor ha sido denunciado por este motivo; sin embargo, tres han sido denunciados por no llevar a bordo del autocar una persona encargada del cuidado de los menores, cuando así procedía.