Vox es, junto a Podemos, un partido de estreno en el pleno de Capitulares. Una de sus dos concejales, Paula Badanelli, se ha encargado de ofrecer un discurso en el que la formación de ultraderecha se ha vanagloriado de “capitanear el cambio que tanto necesita Andalucía”, con referencia a los presupuestos autonómicos y en presencia del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.

De la misma forma, ha defendido su abstención –que ha servido para convertir a José María Bellido en alcalde de Córdoba–, la cual se ha llevado a cabo “por imperativo ideológico”. Un imperativo, ha insistido Badanelli, que “nos impide oponernos al cambio en Córdoba”.

La concejala ha manifestado que Vox “es un medio para conseguir mejorar la vida de las personas” después, ha criticado, de una época de “ruina que ha traído a Córdoba miles de licencias bloqueadas e indecentes listas de esperas en servicios sociales”.

Rafael Saco y Paula Badanelli, concejales de Vox.

Badanelli no ha querido hacer más crítica de estos cuatro años y ha afirmado que ahora hay “cuatro años por delante para hablar de todo esto y mucho más”. Cuatro años, ha advertido, en los que Vox será el “aliento en el cuello de los que pueden cambiar esto”.

Badanelli ha defendido a Vox de manera insistente y ha apuntado que “si el pueblo es sabio no es asunto baladí que haya decidido que Vox esté aquí”. Por esto ha manifestado que “más allá de filias y fobias y estando en las antípodas [en referencia a otros partidos del pleno] no hay votantes de primera ni hay partidos de segunda”. Todo ello para concluir afirmando que “el futuro de Córdoba y España pasa por Vox”.