La actividad comercial está paralizada desde hace más de 40 días y el sector alerta ya de los problemas y de la crisis que está ocasionando. La pandemia del coronavirus ha provocado ya que entre el 70 y el 80% de la temporada esté perdida en Córdoba. 

Es el balance que ha hecho el presidente de Comercio Córdoba, Rafael Bados, quien ha alertado de la situación que atraviesa este sector en la capital cordobesa. Como ejemplo, alude al ámbito del textil. A estas tiendas, ha anotado, la crisis del covid-19 "les ha pillado con las tiendas cargadas de ropa de la temporada primavera-verano y con el género pagado". Un género al que, por el momento, no han podido dar salida debido al estado de alarma, que obliga a mantener las tiendas cerradas y la actividad paralizada.

Bados, además, ha advertido de que "la situación es muy dura y complicada para los comercios porque los pequeños negocios necesitan hacer caja diaria" y, con las tiendas cerradas resulta imposible. En esta misma línea, ha indicado que "hay muchos gastos, que hay que seguir pagando" a pesar de que no se registren ventas y ha añadido que, como consecuencia de esta situación "el problema de liquidez en el sector es muy importante". "Tenemos todas las dificultades", ha insistido.

Bados también ha hecho referencia al posible desconfinamiento y la apertura gradual de las tiendas. Un hecho que motivará que el comercio tenga que adoptar una serie de medidas prescriptivas de higiene y seguridad para los clientes. Al respecto, ha reconocido que en Comercio Córdoba tienen sus dudas acerca de si muchos de los establecimientos en la ciudad van a poder asumirlas: "Hay gente que se va a quedar en el camino y va a tener que cerrar de manera forzosa", ha admitido.

No obstante, ha señalado que "estamos esperando a que nos lleguen las nuevas normas y conocer, entre otros aspectos, las limitaciones de público". "Habrá que esperar a esas normas para no especular", ha matizado, si bien, ha reconocido que "el comercio se tendrá que adaptar".

Demandas al Ayuntamiento

Comercio Córdoba, además, ha acusado a la delegada de Turismo del Ayuntamiento de Córdoba, Isabel Albás, "de ignorar al sector del comercio de cercanía en la elaboración de las líneas estratégicas con el que hacer frente a la crisis por el covid-19".

El sector del comercio representa un tercio de la economía y el empleo en la ciudad de Córdoba, y además forma parte de la realidad turística de la capital, donde aporta más de 800 establecimientos comerciales en el Casco Histórico y miles de puestos de trabajo.

Por ello, Bados ha manifestado también que el Plan de apoyo al Comercio de Cercanía, que comprende el periodo 2017-2022, contempla medidas tales como la determinación de las zonas comerciales en la ciudad de Córdoba que son parte esencial de los recorridos turísticos y aquellas zonas o elementos de potencial atracción al turismo para vincularlas a la oferta turística, entre otras.

Sin embargo, según Comercio Córdoba, las líneas estratégicas para reactivar el sector turístico "no contemplan este ni otros muchos compromisos adquiridos con el comercio de cercanía".

Por tanto, la federación de comerciantes ha afirmado no poder entender la actual postura de Isabel Albás "de no contar con este sector a la hora de establecer los actuales planteamientos para reactivar el sector turístico de Córdoba, hecho que repite desde su llegada a la Delegación de Turismo".

Por todo ello, Comercio Córdoba ha solicitado a Albás que reconsidere la postura de no contar con el sector del comercio de cercanía, que es uno de los sectores principales de la realidad turística de nuestra ciudad y ha señalado que "están abiertos a trabajar con la Delegación de Turismo para normalizar la situación y que la colaboración sea la norma y no la excepción".