En su taller falsificaba prendas de marca y luego las distribuía en boutiques para que las vendieran como auténticas. La Sección Tercera de la Audiencia Provincial ha confirmado una condena de un año y medio de cárcel para M. S. Z., un empresario de Priego de Córdoba, por un delito contra la propiedad industrial. El juez de instrucción también imputó al inicio de la causa a los dueños de una docena de comercios de Córdoba y Jaén donde se vendían las prendas, aunque finalmente no se sentaron en el banquillo. La sentencia considera probado que el procesado adquiría ropa "en blanco" y en su taller le colocaba los signos distintivos de firmas "conocidas", como Lacoste, Levi's o Dockers. Todo ello, "sin el consentimiento necesario de los titulares de las marcas".

La ropa, posteriormente, era vendida al por mayor a ambulantes y en otros casos a comercios, donde los pantalones y las camisetas se ofertaban como si fueran auténticos. Los hechos salieron a la luz pública en noviembre de 1998, cuando agentes de la Guardia Civil realizaron un registro en una nave ubicada en la carretera de Zagrilla. Las patrullas encontraron 1.415 pantalones de diferentes tallas y colores, 2.700 botones y 4.000 remaches con la leyenda de Levi's. Los agentes también se incautaron de cien etiquetas bordadas con la marca Dockers, botones y etiquetas de talla y lavado.

Como consecuencia de diversas denuncias presentadas por Lacoste y la marca de tejanos, el Instituto Armado realizó en Jaén en el año 2000 una nueva intervención de prendas en un mercadillo. Las intervenciones llegaron, incluso, a la provincia de Toledo y a la comunidad de Asturias. El Juzgado de lo Penal 1 condenó al procesado, que recurrió el fallo ante la Audiencia.