Salvador Morera vuelve a La Casa Azul, epicentro de su legado artístico
Ayer tuvo lugar la reinauguración de la fuente de su emblemático patio, obra central de la intervención del artista
¿Qué tienen en común Córdoba y el Museo del Prado?

La Casa Azul (Muñoz Capilla, 15) ha vivió ayer un acto cargado de emoción y simbolismo con la reinauguración de la fuente de su emblemático patio, obra central de la intervención artística de Salvador Morera, quien estuvo presente no solo como homenajeado, sino como pieza clave en el proceso de rehabilitación. Este evento no fue solo la celebración de la restauración de un elemento físico, sino un tributo al artista cuya creatividad transformó este espacio en un referente único de la cultura cordobesa.
El acto, planteado con carácter íntimo y entrañable, reunió a algunos amigos, colaboradores y autoridades relacionadas con la cultura para rendir homenaje a Salvador Morera, cuyo vínculo con La Casa Azul trasciende lo material. Fue en esta casa donde diseñó y creó algunas de las obras más icónicas de Córdoba, como el mural cerámico del Escudo de Córdoba que luce en la fachada del Ayuntamiento, los homenajes al Cante Jondo (en el barrio de Las Moreras), al Maestro y la Maestra, y sus conocidos trabajos de Arte Pacífico, entre los que destacan el Homenaje a La Paz del Sur, el Homenaje a La Paz por Andalucía, y el Homenaje a La Paz por Córdoba, este último ubicado en la Plaza de Muñoz Capilla, frente a La Casa Azul.
Durante su intervención, Morera destacó el compromiso de La Casa Azul con el patrocinio artístico-cultural de Córdoba y la indisoluble conexión entre la ciudad y esta casa, que ha sido testigo y protagonista de la creación de algunas de sus obras más representativas.
Salvador Morera comenzó su formación artística en la Escuela de Artes y Oficios de Córdoba a los diez años, cursando estudios de dibujo, pintura y escultura durante siete años. Su talento lo llevó a continuar su aprendizaje en Centroeuropa, regresando a los 32 años para instalarse definitivamente en Córdoba. Reconocido con la Fiambrera de Plata del Ateneo de Córdoba en 1996, Morera es una de las figuras más destacadas del arte cordobés contemporáneo, cuya influencia se extiende tanto en el ámbito local como en el nacional.
La ceremonia ha contado con la participación de numerosas autoridades, como Isabel Albás, Delegada de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba; Luis Flores, Gerente del IMAE; e Israel Muñoz Gallarte, Vicerrector de Estudiantes y Cultura de la Universidad de Córdoba. Junto a ellos estuvieron Ernesto Hita, Presidente de La Casa Azul, y Jerónimo Jiménez, miembro de la junta directiva y patrono principal de la entidad, además de varios artistas amigos de La Casa Azul.
Tras el descubrimiento y encendido del flujo de agua en la fuente, el público asistente ha podido disfrutar de intervenciones artísticas a cargo de la joven compañía de artes escénicas La Espiga Teatral, Trinidad Montero 'La Trini'; junto a Sergio di Finizio, y el maestro de la guitarra flamenca Rafael Trenas (padre). También estuvieron presentes artistas plásticos y colaboradores como el cordobés Pepe Puntas, Remedios Rubiales (responsable de FADAC, Feria Andaluza de Arte y Cultura) y Lisa Vlietstra, de La Casa Cuadrada (El Coronil, Sevilla), ambas componentes del Foro Cultural Andaluz, promovido por La Casa Azul y otros representantes de la cultura de nuestra ciudad como Ricardo Rojas, Presidente de la Cofradía del Rabo de Toro cordobés.
La Casa Azul reafirma así su misión de ser un espacio de conservación, creación y promoción cultural, consolidándose como un punto de encuentro único para el arte en todas sus formas.
También te puede interesar
Lo último