Turismo

Villanueva de Córdoba: Diez planes para conocer la mayor dehesa de encinas de Europa

Observatorio de Fauna

Observatorio de Fauna / Turismo de Los Pedroches

Los Pedroches o Valle de Los Pedroches es la comarca más septentrional de la provincia de Córdoba. Compuesta por 17 municipios, el otoño junto con la primavera son las estaciones más agradables para visitar este mar de encinas, edificios realizados con piedra de la zona (granito y pizarra), y gastronomía donde la carne de cerdo ibérico tiene un protagonismo incuestionable. 

Uno de los pueblos con mayor número de atractivos para el turista es Villanueva de Córdoba, situada a poco más de una hora de la capital. Una escapa perfecta para los amantes tanto del turismo cultural, de naturaleza, astroturismo y también gastronómico

Nuestra primera parada es Villanueva de Córdoba. Es muy recomendable visitar la Iglesia de San Miguel Arcángel, patrón de la localidad. La construcción de la primitiva iglesia se inició en 1.553, año en el que Carlos V le concedió el título de Villa a este pueblo. Fue reformada completamente en el siglo XVIII -ya que debido al terremoto de Lisboa se hundió el techo y a que su espacio resultaba insuficiente para una población cada vez mayor- y se le añadió la torre y la sacristía parroquial.

Está ubicada en la Plaza de España y hasta 1956 fue la única iglesia de la localidad que contó con el rango de parroquia. Merece la pena también detenerse a observar sus retablos barrocas y sus ricas piezas de orfebrería. 

Igualmente, no está de más recrearse en la Ermita de Jesús, la Iglesia del Dulce Nombre de Jesús y la Iglesia de San Sebastián, que harán las delicias de los admiradores de la arquitectura religiosa.

Centro de Interpretación de la Dehesa Centro de Interpretación de la Dehesa

Centro de Interpretación de la Dehesa / Ayuntamiento de Villanueva de Córdoba

Durante el paseo por la localidad, resulta parada obligatoria la Antigua Audiencia. Este icónico edificio fue en el siglo XVII Casa Consistorial o Cabildo de Villanueva de Córdoba, y está ubicado en la Plaza de España.

Justamente debajo está el Refugio Aéreo mejor conservado de la provincia, que ha sido recuperado para actividades municipales y cómo recuerdo de un capítulo de la historia tan cruento como fue la Guerra Civil. 

Siempre resulta curiosa la visita al Centro de Interpretación de la Dehesa, una casa típica del s. XIX, restaurada y convertida en un museo. Se explica la dehesa como medio natural y económico, así como la cultura y las formas de vida que ésta ha generado a lo largo de la historia. 

Grupo de excursionistas durante una ruta por la dehesa Grupo de excursionistas durante una ruta por la dehesa

Grupo de excursionistas durante una ruta por la dehesa / Turismo de Villanueva de Córdoba

La estrella de los cerdos

Aunque uno de los platos fuertes de la visita es hacer alguna ruta por la dehesa. Una maravillosa fórmula para respirar aire puro, alejarse del mundanal ruido y adentrarse en plena naturaleza oyendo el canto de los pájaros, el movimiento de las hojas y el olor de las plantas aromáticas silvestres. 

Además, estamos en meses de montanera o del final del engorde de los cerdos ibéricos. Verlos moverse y alimentarse en la dehesa es todo un espectáculo. Y es que el ganador porcino de Los Pedroches se alimenta de frutos forestales como la bellota, de hierba, restos de cosechas, raíces y tubérculos que obtiene hozando la tierra contribuyendo. 

Igualmente, quienes hagan noche en el pueblo pueden contemplar uno de los cielos estrellados más espectaculares del mundo. No en vano, desde 2016 la Comarca de Los Pedroches recibió el certificado Starlight, que sólo consiguen aquellas zonas que aún mantienen valores adecuados de oscuridad y condiciones óptimas para la observación y estudio del firmamento.

En el caso de Villanueva de Córdoba, es el conocido Santuario de la Virgen de la Luna donde se apuestan quienes quieren conseguir las mejores imágenes. Además, no hay que invertir demasiado tiempo en un agradable paseo en coche desde el núcleo urbano del pueblo.

Y para reponer fuerzas, lo mejor es comer en algunos de sus bares o restaurantes, donde disfrutar de un buen jamón ibérico de bellota, AOVE ecológico de la tierra y carne de monte.

El encanto de la cocina jarota viene dado, en buena parte, por sus condimentos. Algunos de los platos más representativos son: el salmorejo, el gazpacho, las migas tostás, el ajo migao y la singular chanfaina, que es la comida típica el día de la matanza.

Algunos de los establecimientos más reputados de Villanueva de Córdoba son: La Bodega de Lucman, Restaurante Las Dos Columnas, Mesón Rural Don Rollero y Restaurante La Puerta Falsa. 

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