Día Mundial de la Tuberculosis

La tuberculosis multirresistente sigue siendo una de las principales causas de muerte infecciosa en el mundo

La tuberculosis multirresistente sigue siendo una de las principales causas de muerte infecciosa en el mundo

La tuberculosis multirresistente sigue siendo una de las principales causas de muerte infecciosa en el mundo

La tuberculosis se origina por una bacteria llamada Mycobacterium tuberculosis y se transmite por la propagación de los gérmenes a través del aire al toser, estornudar o hablar. Sin embargo, no se contagia al tocar, besar o compartir alimentos o platos. La tuberculosis tiene cura y tratamientos, pero, en algunos casos se vuelve resistente o multirresistente a los dos más utilizados para tratar esta enfermedad: la isoniazida y la rifampicina.

Estos medicamentos son los más efectivos contra la infección, lo cual quiere decir que los medicamentos habituales no son efectivos para tratar esta forma de tuberculosis y se necesitan tratamientos alternativos más prolongados y complicados. De esta forma, se presenta un problema porque al no poder controlarse la enfermedad, aumenta el riesgo de propagación.  

Esto se había conseguido a principios del siglo XX, pero en la década de los 80 con la aparición del VIH/SIDA avivó de nuevo la llama de la tuberculosis, sobre todo en los países con menos recursos. En este contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declara en el año 1993 la tuberculosis como una emergencia sanitaria mundial.

Más inversión en tratamientos

A día de hoy, la OMS sigue reclamando más inversión en los tratamientos preventivos. Por eso, ha publicado recientemente un documento en el que argumenta sobre esta necesidad e insta a los Estados Miembros a que aceleren el proceso, ya que causa 1,3 millones de muertes cada año y afecta a millones de personas más.

"Hoy contamos con el conocimiento, las herramientas y el compromiso político que pueden poner fin a esta enfermedad milenaria que sigue siendo una de las principales causas de muerte infecciosa en el mundo", ha señalado el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, quien ha insistido en la necesidad de "invertir en intervenciones basadas en evidencia" y "promover la cobertura sanitaria universal".

Ha habido una mejora con respecto a los tratamientos, pero el acceso al mismo continúan siendo limitados. Algo que preocupa a la OMS, desde donde aseguran que "prevenir la infección por tuberculosis y detener la progresión de la infección a la enfermedad son fundamentales para reducir la incidencia de esta enfermedad a los niveles previstos por la Estrategia Fin a la Tuberculosis de la OMS".

Tipos de tuberculosis

Hay varios tipos de tuberculosis dependiendo de la localización. 

  1. Tuberculosis pulmonar: Es la forma más frecuente de tuberculosis y afecta a los pulmones. Los síntomas incluyen tos persistente, fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso y cansancio extremo.

  2. Tuberculosis extrapulmonar: Esta forma de tuberculosis afecta a partes del cuerpo distintas de los pulmones, como los ganglios linfáticos, los riñones, los huesos o el sistema nervioso y representa menos del 30% de los casos.

  3. Tuberculosis latente: En este caso, una persona está infectada con la bacteria de la tuberculosis, pero no presenta sintomatología, ni es contagiosa. Sin embargo, puede desarrollar tuberculosis activa en el futuro si no se trata.

En cuanto a cuál es la más peligrosa, la tuberculosis multirresistente y la tuberculosis extremadamente resistente son consideradas las formas más peligrosas porque son difíciles de tratar con los medicamentos estándar y requieren otro protocolo de tratamiento que llevarían más tiempo, son más complejos y costosos. Además, aumentan el riesgo de propagación de la enfermedad, especialmente en comunidades donde hay una alta carga de tuberculosis y acceso limitado a la atención médica adecuada.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios