Cerca de 2,000 personas mueren por cáncer de piel de células basales y de células escamosas cada año. La Sociedad Estadounidense del Cáncer informa que el carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas son los dos tipos más comunes y aparecen en áreas expuestas al sol, como la cara, la cabeza y el cuello. Más de 3,3 millones de casos de estos dos tipos de cáncer se diagnostican en los Estados Unidos cada año. Se espera que una de cada cinco personas en los Estados Unidos desarrolle la enfermedad durante su vida. Es el caso de la primera dama de los Estados Unidos, Jill Biden, quien el pasado miércoles se sometió a un procedimiento quirúrgico conocido como cirugía de Mohs para extirparle dos lesiones cancerosas de la piel,  parte de un carcinoma de células basales. Los médicos detectaron estas lesiones en una revisión rutinaria de prevención contra el cáncer de piel. Uno de los tumores estaba localizado en el párpado del ojo derecho y el otro, en el lado izquierdo del pecho.

Este tipo de lesión cancerosa en la piel es el tipo más común en humanos, y una de las causas más importantes es la exposición al sol y las camas de bronceado sin protección. Otras causas menos comunes incluyen la exposición repetida a rayos X, cicatrices de quemaduras graves, exposición al arsénico en el medio ambiente y antecedentes familiares de cáncer de piel. Para este tipo de cáncer de piel, la cirugía de Mohs es altamente efectiva y funciona para extirpar completamente el cáncer cutáneo, con un menor índice de recidivas. ¿Cómo funciona? Te contamos lo que debes saber sobre esta técnica. 

¿Qué es la cirugía de Mohs?

La cirugía de Mohs un procedimiento que se usa para tratar el cáncer de piel. Esta cirugía implica el corte de capas finas de piel. Cada capa fina se examina detenidamente en busca de signos de cáncer. El proceso se va repitiendo en las capas subsiguientes, hasta alcanzar una en la que ya no queden restos del tumor, con lo que se tiene la certeza de haber acabado con el mismo.

Es un tratamiento quirúrgico altamente especializado para el cáncer de piel que proporciona el más elevado índice de curación, comparado con las técnicas tradicionales. De hecho, la reaparición de tumores operados con esta técnica (recidiva) es apenas del 1 al 4%, en cambio con la cirugía convencional varía entre 10 y 15%

El objetivo de la cirugía de Mohs consiste en extirpar todo el cáncer de piel sin dañar la piel sana que lo rodea. Se utiliza a menudo con el fin de tratar el cáncer de piel con las siguientes características:

El procedimiento es bastante sencillo, y se basa en realizar un estudio histológico de la lesión, con lo que se determinan sus límites de manera precisa. Esto permite que los cirujanos estén seguros de haber extirpado toda la lesión.

La operación se realiza mediante un proceso ambulatorio con anestesia local para adormecer el sitio de la cirugía. Una vez que el área esté adormecida, se extirpará el tejido canceroso y una delgada capa del tejido que lo rodea. Una vez examinadas y eliminadas las áreas afectadas,  se remata aplicando un apósito a la herida, cerrándola con puntos de sutura o incluso realizando un injerto de piel, en función del tamaño y la morfología de la misma se reconstruye con injerto la esa zona y se coloca un vendaje sobre la herida.  La intervención es rápida y se suele dar de alta al paciente el mismo día.