Alto Guadiato

Cierra la histórica central térmica de Puente Nuevo

Central térmica de Puente Nuevo, en Espiel.

Central térmica de Puente Nuevo, en Espiel. / E. D. C.

Tras más de 50 años en activo, la central térmica de Puente Nuevo, en Espiel, ha echado el cierre. España se ha adelantado en el cumplimiento de los compromisos europeos para llegar a la neutralidad de emisiones en 2050 con el cierre este martes de siete centrales térmica, entre las que se incluye la ubicada en la provincia de Córdoba y propiedad de Viesgo, que a lo largo de todos estos años ha sido un motor de actividad para la comarca del Alto Guadiato.

La instalación fue autorizada por el Ministerio de Industria el 2 de agosto de 1976, y desde entonces ha dado trabajo a alrededor de 70 personas de la zona. El proyecto de desmantelamiento se limita "exclusivamente" al perímetro de la central, lo que supone el 20% de toda la instalación. Así, según consta en el propio expediente, en el cierre no se incluye la subestación, propiedad de Red Eléctrica y Endesa; el tramo de vías férreas exteriores; el vertedero de cenizas, o la balsa de decantación, localizada a aproximadamente 1,5 kilómetros.

Viesgo ya informó en su día de que asume que la demolición parcial de instalaciones se realizará de forma selectiva, de modo que se favorezca el reciclaje de los residuos. Además, el plan no contempla el desmantelamiento total, sino una "puesta en seguridad de las instalaciones". De esta manera, apunta la empresa, "se mantiene el valor del emplazamiento para posibilitar su reaprovechamiento por una actividad económica futura".

Hacia la transición energética

Para la abogada ambientalista Carlota Ruiz-Bautista el cierre de las siete centrales térmicas de España es un "paso fundamental para acelerar la transición energética". Ruiz-Bautista, abogada del Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (Iidma), ha señalado que llevan trabajando desde 2014 para que "el cierre de las centrales de carbón en España se produzca no más tarde de 2025".

El año 2025 es la "fecha límite" para que el cierre de las centrales de carbón en España pueda "alinearse con los Acuerdos de París", que señala la necesidad de reducir las emisiones -causantes del calentamiento global- con el objetivo de limitar a 1,5 grados la subida de la temperatura del planeta hasta final de siglo.

En Europa ese alineamiento con el Acuerdo de París debe producirse en 2030, aunque, no obstante, en España el cierre de siete centrales incrementa la reducción de emisiones y de otros contaminantes como dióxido de azufre (SO2), dióxido de nitrógeno (NO2) o partículas "causantes de muchas enfermedades".

Las centrales dejarán de funcionar al finalizar el periodo de vigencia del Plan Nacional Transitorio (PNT), que les autorizó a funcionar desde el 1 de enero de 2016 hasta el 30 de junio de 2020 "sin cumplir con los límites de emisión de la normativa europea".

Este mecanismo de excepción recogido en la Directiva de Emisiones Industriales de la Unión Europea obliga a cerrar Compostilla II (en León) y Andorra (en Teruel), ambas propiedad de Endesa.Asimismo, Velilla (Palencia), de Iberdrola; Narcea (Asturias), La Robla (León) y Meirama (A Coruña), de Naturgy, y Puente Nuevo (Córdoba) de Viesgo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios