Provincia

Fallece un albañil tras caer desde 12 metros arrastrado por un montacargas

  • Tanto la investigación como los sindicatos aseguran que la grúa no estaba bien anclada y que se vino abajo por un exceso de peso · El trabajador no llevaba casco ni poseía el necesario arnés de seguridad

Juan Francisco Jurado Jiménez, de 46 años, casado y con un hijo de 18 años, es el nombre de la octava persona que pierde la vida en un accidente laboral en Córdoba en lo que va de año. En esta ocasión, el siniestro se produjo a primera hora de ayer en El Carpio. La víctima se precipitó al vacío arrastrado por un montacargas con el que trabajaba desde una altura de 12 metros, según informaron fuentes de la investigación.

El suceso ocurrió a las 07:10 en la obra de construcción de un bloque de viviendas a la altura del número 15 de la calle Colegio de El Carpio. El hombre estaba trabajando en la azotea del inmueble manipulando un pequeño montacargas. Al parecer, la grúa –que en estaba cargada con material de construcción– cedió por un exceso de peso y se precipitó al vacío por un patio interior, arrastrando en su caída al trabajador, que falleció en el acto.

Según fuentes de la investigación, el albañil no llevaba puesto ni el casco ni el arnés de seguridad obligatorio para desarrollar el trabajo que estaba ejecutando. Al contrario, los investigadores no hallaron en el lugar del siniestro “ningún punto donde poder enganchar el arnés”. Aparte, las mismas fuentes sostienen como la causa más probable del siniestro que la grúa no estaba bien fijada y que el peso de la carga que soportaba era excesivo.

El responsable de Salud Laboral del sindicato de CCOO en Córdoba, Andrés Pozuelo, explicó ayer a El Día que este tipo de montacargas debe estar soldado a una viga o al suelo para garantizar su seguridad. Además, Pozuelo explicó que el trabajador debe estar sujeto con un arnés a un punto distinto al que está amarrada la grúa para evitar que una hipotética caída del montacargas arrastre al obrero, como ayer sucedió en El Carpio. Pozuelo sostuvo que la grúa estaba fijada “con dos sacos de arena” que fueron incapaces de aguantar el peso. Por contra, los investigadores aseguran que la máquina estaba fijada sobre su eje y al techo con puntales metálicos de obra.

El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Montoro ya se ha hecho cargo del caso. Mientras tanto, tanto el sindicato CCOO como UGT han anunciado que denunciarán este nuevo accidente laboral tanto ante la Fiscalía como en la Inspección de Trabajo porque a su juicio no se cumplían las normas mínimas de seguridad.

El secretario general de Federación de Metal, Construcción y Afines de UGT en Córdoba, Vicente Palomares, dijo ayer que “no se puede consentir que sigan ocurriendo accidentes de este tipo porque se menosprecia que estas máquinas deben anclarse al suelo contundentemente y no como suele hacerse, de forma provisional y sin garantías de seguridad”.

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