Fin de semana de color y algarabía en toda la provincia. El tiempo acompañó, y la mayoría de los municipios vivieron ayer sus desfiles de Carnaval entre charangas, comparsas, máscaras y mucha imaginación. Fue una jornada de calle y jolgorio desde primera hora de la mañana, pues el calendario apremia y pronto habrá que cambiar los disfraces por las túnicas y el incienso.

En Puente Genil, la plaza de Ricardo Molina fue el inicio de un pasacalles que culminó en el patio del Instituto Manuel Reina, donde continuó la fiesta. Entre las novedades de este año, se han unificado los desfiles infantil y adulto, se han incorporado carrozas y se ha recuperado el entierro de la sardina, que no se celebraba desde hacía diez años.

Montilla también disfrutó ayer de su pasacalles, que partió de la avenida de la Constitución a las 11:00 y concluyó en la plaza de la Rosa. La guerra de las ansias, de la Asociación Gastronómica y Cultural La Pampa, o Priscila, de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos Casas Nuevas, hicieron bailar a los asistentes.

En Palma del Río, veinte años después, el Carnaval volvió a tener un pregón. La escalinata del Ayuntamiento se convirtió en el lugar donde Fernando Mikel, caracterizado de Poncio Pilato, puso la chispa pícara y simpática a unos días pensados para salir a la calle emulando a multitud de personajes o inspirado por motivos dicharacheros. Tras las palabras del pregonero, una caravana de disfraces partió desde la plaza Mayor de Andalucía bajo la música de una charanga para recorrer el centro de la ciudad entre coreografías y los sonidos de las chirigotas, cuartetos y asociaciones locales.

Previamente a este acto inaugural de ayer domingo, el Teatro Coliseo acogió el sábado la XIII Muestra de Murgas Locales. El patio de butacas se puso varias veces en pie ante las letrillas de Todo va sobre ruedas, Los exploradores (que gritaron tierra a la vista y le perdimos la pista), Los que te ponen en línea y Los que esconden el conejo. La noche estuvo presentada por Este cuento tiene guasa; además, la chirigota Las del comando SSA (Suegras Siempre Armadas) de Fuente Palmera participó como invitada.

En Pozoblanco, la música de las agrupaciones que en la noche del sábado actuaron en el teatro El Silo llenó ayer las plazas y las calles principales. Y en Rute ayer se vivió el concurso infantil de disfraces en el Paseo de Francisco Salto. La fiesta continuará el miércoles con la celebración del tradicional entierro de la sardina, que se prolongará durante toda la madrugada.