Cinco años. Es el nuevo plazo verbalizado por Ciudadanos, partido que ostenta el Gobierno andaluz junto al Partido Popular, sobre la ejecución definitiva y efectiva del hospital público de Lucena.

Antes de la reunión con empresarios feriantes provenientes de diferentes provincias andaluzas, después de que el Ayuntamiento de Lucena haya aprobado la moción de la formación naranja que impulsaba una Feria de la Primavera en la localidad, Fran Carrillo, portavoz adjunto de Cs en el Parlamento de Andalucía, ha aseverado que Lucena “a partir del próximo lustro tendrá su hospital y su sede judicial”. 

El diputado andaluz Fran Carrillo, que ha acudido a la localidad junto a su compañera en la Cámara regional, Mónica Moreno, ha defendido que estas dos demandas históricas que “llevaban en el cajón del olvido muchísimos años” cristalizarán por “el trabajo” de Ciudadanos tanto en el Ayuntamiento de Lucena como en la Junta.

El fin de los sucesivos gobiernos socialistas en San Telmo y “el cambio de hace dos años”, ha argumentado Carrillo, favorecen “que estos compromisos se saquen del cajón”. Durante su alocución, retóricamente, ha preguntado, en alusión al PSOE, que “quién gobernaba en la Junta, por qué no se hacía nada”.

Mónica Moreno, Fran Carillo y Jesús López.

Mientras la adjudicación de la construcción de la sede judicial se ha de formalizar en breve, estas expresas declaraciones vertidas desde Ciudadanos se verbalizan en un espacio temporal de giro en la atmósfera que circunda a la reivindicación sanitaria que, hace justamente 15 años, el 6 de abril de 2006, movilizaba en Lucena a miles de personas.

Reunión entre el alcalde de Lucena y Jesús Aguirre

La reunión del consejo interterritorial nacional de Salud del pasado Miércoles Santo motivó la suspensión de la visita oficial anunciada por Jesús Aguirre, consejero de Salud y Familias, al ayuntamiento de Lucena, donde había previsto una reunión con el alcalde, posteriormente un encuentro con los portavoces municipales y, finalmente, una comparecencia ante los medios de comunicación.

Después de meses de insistencia constante desde el Consistorio de Lucena, para la celebración de un encuentro entre Aguirre y las fuerzas políticas locales, con el propósito de discernir las pretensiones de la Junta con la dotación sanitaria pública, el consejero accedía a esta petición.

Al aplazamiento de la convocatoria organizada para el cuarto día de Semana Santa le sucedió una reunión, que tenía lugar ayer lunes en Sevilla, entre el propio alcalde, Juan Pérez, y el consejero, Jesús Aguirre. También acudió la concejala de Sanidad de Lucena, Carmen Gallardo. Horas después, Pérez informó a los portavoces municipales sobre el transcurso de esta entrevista y los pormenores de las premisas y explicaciones expuestas por el consejero de Salud. Los participantes en esta cita convinieron posponer cualquier manifestación pública sobre la materia hasta el inminente desplazamiento de Aguirre a Lucena.

Interpelado por la prensa, el portavoz local de Cs, Jesús López, que escoltaba a Carrillo y Moreno, en una breve intervención, ha dicho que “el compromiso” acerca de la materialización del hospital gestionado por el SAS en el Paraje Dehesa de la Villa “es firme”. Asimismo, ha avanzado que “muy probablemente la semana que viene”, a priori el lunes próximo, precisan otras fuentes solventes, Jesús Aguirre se traslade a Lucena “para ofrecer los detalles del proyecto y de cómo irá avanzando en los próximos tiempos”. En todo caso, ha ratificado la previsión de Carrillo, delimitada en cinco años, puesto que “no hay razones” que justifiquen “obviarlo más tiempo”.

Distintas fuentes consultadas confirman las alentadoras expectativas y realmente satisfactorias impresiones emanadas de los últimos movimientos y palabras pronunciadas, en privado, por Jesús Aguirre sobre una promesa reflejada en el actual presupuesto andaluz con una partida de 320.000 euros. El silencio de la Junta de Andalucía en los últimos meses y mensajes ambiguos y contradictorios, unido a la apertura progresiva del hospital privado Centro de Andalucía habían acentuado la incredulidad y el recelo.