Pues una vez convocadas las elecciones autonómicas y aunque casi todo el mundo las esperaba, el nerviosismo propio de la cita electoral se nota ya en todos los partidos que se presentan. Córdoba no es una excepción y se trabaja ya en la precampaña, campaña e incluso la post campaña, porque en algunos municipios podría haber alguna que otra sorpresa. Lo que sí es cierto es que por mucho que desde las direcciones se intente presionar, los alcaldes y alcaldesas van un poco (o mucho) a lo suyo, porque su reválida ante los ciudadanos se la juegan en mayo, que está a la vuelta de la esquina.