El fuste

Jesús Cabrera

Lo de Obama trae cola

DESPUÉS de la famosa frase de Barack Obama del jueves en El Cairo, esta ciudad ya sueña con la presencia del presidente de los Estados Unidos paseando por la Judería, de perol en la Sierra, de tapeo por San Lorenzo, de flamenquito por San Basilio. La mejor reacción ha sido la del alcalde, Andrés Ocaña, invitando al mandatario estadounidense a visitar esta ciudad y la del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, afirmando que hará lo posible por lograr esta visita desvinculándose de los pelotas que al estilo de Leire Pajín ya anunciaban que la mención de Obama era fruto del también diputado por Córdoba. En la calle hay euforia, para qué negarlo. Es normal que se aproveche para rentabilizar al máximo esta situación, como hizo Clinton cuando subió al mirador de San Nicolás en Granada. Desde entonces, y han pasado ya unos cuantos años, centenares de turistas se disponen cada día a ver el atardecer "más bello del mundo" frente a la Alhambra. Si se conjugan los planetas y finalmente se consigue que Obama pise como poco esta ciudad, nos habrá tocado el premio más gordo de la lotería. Ver el Air Force One aterrizar junto a las parcelas de Fontanar de Quintos, o al presidente brindar con un medio de vino o probar un salmorejo serán estampas dignas de colgar para la posteridad en la pared de cualquier taberna, junto con las de la Mezquita-Catedral nevada. Lo de Obama ha venido a alegrarnos la tristeza del fin del Mayo Festivo.

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