El tubista cubano Harold Hernández es uno de los ocho miembros de The Dix Machine, una banda nacida en Córdoba y formada en su mayoría por profesores de conservatorio que, desde su formación en 2008, recupera e interpreta temas enmarcados en el dixieland, el estilo de jazz tradicional de los años 20 y 30. Hernández inaugurará esta tarde a las 20:00 el Festival de Blues Ciudad de Córdoba junto a Jesús Rodríguez Azorín (trompeta), Javier Delgado (clarinete), Cristóbal Agramonte (saxo tenor), Rafael Martínez (trombón), Antonio Contreras (banjo), Luis Alberto Fernández Pericet (piano) y José Luis León (batería) con un pasacalles que recorrerá el bulevar del Gran Capitán hasta llegar al pub Long Rock Centro.

-¿Por qué surge The Dix Machine?

-La idea surgió del banjo del grupo, que es la persona más experimentada en este tema. Un día nos reunimos y vimos que nos gustaba hacer este tipo de música, el dixieland, el germen del jazz. Y dijimos: ¿por qué no hacemos algo ya que en Córdoba no hay una agrupación así y de paso aprovechamos y hacemos parte de la música que nos interesa? Conseguimos los arreglos y las partituras y así llevamos casi dos años funcionando.

-¿Por qué eligieron el dixieland?

-Porque nos une a todos el gusto por el jazz. No creo que fuera por algo más que por nuestro gusto por hacer, realizar y dar a conocer este tipo de música, la más tradicional, la primera, de donde surgió el resto del jazz.

-¿Qué aceptación tiene?

-Al público en general y a los amantes de la música les gusta y les llama la atención al ser tradicional, al no ser el jazz que se pregona a diario. La gente disfruta el dixieland sobre todo porque es más bailable que el jazz de concierto al estar basado en ritmos danzables del sur de EEUU. Por eso al público le llega, le gusta y se le pega más que otros estilos.

-Hasta el momento han grabado un disco, La máquina del tiempo. ¿Tienen algún proyecto más?

-Estamos pensando en eso, pero como no pertenecemos a ninguna discográfica dependemos de nuestro esfuerzos y ahorros. Pretendemos hacerlo, estamos preparando una selección de temas que amplían el espectro del anterior disco. Ahora queremos abrirnos a las invitaciones vocales. A ver si lo conseguimos.