La voracidad compradora de Emilio Botín parece no tener límites. Menos de dos meses después de anunciar la toma del banco hipotecario británico Alliance&Leicester (A&L), Banco Santander, la entidad que preside, confirmó ayer que ha presentado una oferta para adquirir el 50% del banco alemán Postbank que está en manos de Deutsche Post. El importe de la operación no ha sido revelado.

No obstante, Santander compite con Deutsche Bank, el gigante germano, que ha manifestado su intención de adquirir una participación del 29,75% de Postbank, para no tener que lanzar una OPA. El consejero delegado de Postbank, Frank Alpple, prefiere que sea la entidad germana quien entre en el capital y la agencia Dpa aseguraba ayer por la noche que Deutsche ha acelerado sus planes y podría ser finalmente quien se imponga.

Santander precisó a la CNMV que tiene interés en iniciar negociaciones para una posible adquisición de Postbank "a través de una oferta indicativa y sujeta a 'due dilligence' (auditoría previa)". El banco precisa que la adquisición se haría extensiva al 100% del capital de Postbank ya que, al comprar la participación del 50% más una acción que Deutsche Post ostenta en esta entidad, se vería obligado a lanzar una oferta pública de adquisición de acciones sobre el resto.

Santander ya compró en junio a General Electric su unidad de negocio General Electric Money en Alemania, y su presidente, Emilio Botín, puso entonces de manifiesto el interés del banco por este mercado cuando confirmó que la entidad cántabra también estudió adquirir la división de crédito al consumo de Citigroup en el país, aunque finalmente decidió no llevar a término la operación. El interés del banco español por fortalecer su presencia en Alemania le ha llevado a estar en todas las quinielas para hacerse también con el Dresdner Bank, rumor sobre el que el banco español siempre ha declinado pronunciarse.

Además de A&L, Santander aún se encuentra en pleno proceso de integración de los activos que adquirió al banco holandés ABN Amro, en consorcio con RBS y Fortis, entre ellos Banco Real en Brasil.