Los hermanos Carrasco, Dimas y David, seguirán al frente del Ciudad de Lucena. Tras la brillante temporada recientemente finalizada, en la que los celestes cayeron en la final del play off de ascenso a Segunda División B ante el Betis Deportivo, el club y los técnicos sevillanos han llegado un acuerdo para prolongar su vinculación y dar continuidad a un proyecto que, lógicamente, sufrirá algunas variaciones.

"Estamos hablando el mismo idioma y no habrá ningún problema", apuntó ya el pasado sábado tras caer en el último partido del curso Dimas Carrasco, aún en caliente desde el Marbella Football Center. Era el preludio de lo que este viernes ya es oficial. Tras unos días de obligada desconexión, el Ciudad de Lucena y los entrenadores astigitanos han cerrado el esperado acuerdo con el que arranca la reconstrucción del equipo.

Porque desde ya las partes trabajan en "armar el próximo proyecto, que tiene muy buenos cimientos, lo que no teníamos el año anterior". El objetivo tanto de la entidad celeste como de Dimas y David Carrasco es mantener gran parte de la base que tan buen rendimiento ha dado en el curso 19-20, algo que no tendrán nada fácil.

Porque la actuación de muchos de sus jugadores ha llamado la atención de otros clubes. Sin ir más lejos, la portería todo apunta que será nueva, pues Javi Cuenca lo tenía muy avanzado con el Mérida, de Segunda B, mientras que Molero se ha unido al Porcuna, del Grupo IX y que está dirigido por el ex cordobesista Rafa Navarro. Además, Luismi Redondo ha firmado por el Córdoba CF, mientras que Erik se marcha al Vetusta, filial del Real Oviedo.

Pero si no es con esos mimbres, será con otros con los que el Ciudad de Lucena intentará volver a luchar por el ascenso de categoría que tan cerca ha tenido en la pasada campaña. "Si antes teníamos razones para soñar, ahora las hay el doble", fue el mensaje final de Dimas tras la dolorosa derrota ante el Betis Deportivo que ha abierto una nueva etapa en el club, aunque bajo la misma dirección de los hermanos Carrasco.