Un "aborigen de Córdoba" guía el concurso

Sin noticias del administrador concursal que debe nombrar el Real Madrid, el taxi que traía al auditor de cuentas Daniel Pastor y al abogado Alberto Escudero paró en El Arenal, con el tinglado de la Feria a medio desmontar, a las 09:15. José Miguel Salinas les esperaba en los aledaños de El Arcángel, donde les dio la bienvenida. Pasadas las 13:30, después de hacer un receso para visitar las instalaciones una hora antes, el presidente del Córdoba cedió la palabra a sus flamantes aliados con un desliz: citó a otro Daniel, Luque. El implicado le corrigió. Escudero, colegiado con el número 1.374, perteneciente al Bufete 244 C.B. y profesor asociado de la UCO, no dijo ni pío; Pastor, con más tablas en estos asuntos, dio el paso e hipnotizó a los periodistas con sus argumentos.

En una de sus intervenciones se le vio el plumero: "Si nos queremos traer a Leo Messi a jugar en el Córdoba, le daremos el dorsal 10 si no lo quieren otros jugadores veteranos, y tendrá que aportar ese dinero con las garantías suficientes el nuevo propietario". No fue casualidad que nombrara a la estrella del Barcelona, porque luego reconoció su profunda simpatía por el reciente campeón de Europa. Con un amplio bagaje en concursos de acreedores (clubes de fútbol como el Málaga y el Linares, la inmobiliaria Aifos...) a través de Daniel Pastor & Asociados, fue presidente de la Fundación del Málaga. Le gusta el fútbol, mucho, y el domingo por la noche telefoneó a Salinas para felicitarle por la permanencia. Todos salían ganando.

Ya se reunió con el vicepresidente Fernando Peña el jueves 26, el día que salió a la luz el auto 170/11. El documento que, firmado por Fernando Caballero, ha introducido al Córdoba en una dimensión desconocida. "Quiero expresar que desde el Juzgado de lo Mercantil, ya que el juez es de aquí -en concreto, de Palma del Río-, tienen deseo de que el Córdoba continúe", desveló Pastor, que desde el principio se ha erigido en la bandera de un "concursillo" en comparación con el del Málaga. Será en consenso con el letrado cordobés Alberto Escudero. Además, el abuelo del auditor malagueño nació en Almodóvar del Río, así que se considera "un aborigen de Córdoba". Todo queda en casa.