Del mal, el menos. Eso debe pensar Alberto Monteagudo tras conocer que estará alejado de los terrenos de juego aproximadamente tres semanas por culpa de un desgarro en el menisco exterior de su pierna derecha. El centrocampista albaceteño se lesionó en los primeros minutos de la segunda mitad del encuentro del pasado fin de semana ante el Conquense -tras ir a por un balón dividido con Víctor Sánchez- y, tras una primera exploración, llegó a temer por lo que resta de temporada. Al final, ayer, los resultados de la resonancia magnética a la que fue sometido, arrojaron una lesión menor que le permitirá seguir ayudando en varias semanas al equipo lucentino en su lucha por amarrar la permanencia en la categoría.

De todas formas, la lesión de Monteagudo trastoca los planes de Antonio Gutiérrez, que había confiado en él para ejercer las funciones de pivote defensivo en su dibujo 3-4-1-2. Ahora, el técnico tendrá que buscar una solución que pasa por colocar a Antonio Sarmiento o ajustar a Sergio Bustos, dando a Rubén García la plaza vacante en la defensa.

Las primeras pruebas se podrán ver este domingo (Ciudad Deportiva, 12:30) ante el San Fernando, en la primera jornada de la segunda vuelta de la competición. El conjunto celeste llegará especialmente motivado a la cita tras el 4-0 encajado en la apertura del campeonato en el terreno de juego de Bahía Sur.