Luque: "No le guardo rencor a nadie"

Después de toda una carrera lejos de casa, hace dos años por fin tuvo la oportunidad de defender los colores del Córdoba. Jorge Luque fue el primer fichaje de la era Alcaraz y, curiosamente, el adiós de ambos a la casa blanquiverde llegó también de la mano. Ninguno entraba en los planes de la nueva dirección del club, aunque durante el verano las puertas para la continuidad del centrocampista siempre estuvieron entreabiertas. Al final, no hubo entendimiento -las diferencias económicas y temporales parecieron siempre insalvables- y el cordobés volvió a coger las maletas y, junto a su mujer y sus tres niños, puso de nuevo rumbo al levante español, muy cerca de donde, casualidad o no, también algunos de sus primeros pasos como profesional en el Alicante. Ahora es el organizador del Elche, un conjunto que por su condición de finalista en el play off de la temporada pasada -cayó ante el Granada- parte como favorito a pelear de nuevo por el ascenso a Primera. Pero para eso aún falta mucho. Antes, mañana mismo, JSA Luque se medirá a su exequipo. Lo hará "sin rencor ni ánimo de venganza" por todo lo acontecido en los meses finales de dos notables ejercicios en El Arcángel, pero con la única intención de alargar la recuperación de la escuadra ilicitana.

-¿Cómo le va la vida por Elche?

-Muy bien. Estoy contento. Para mí no es nueva la ciudad porque ya estuve varios años en el Alicante y conocía a varios jugadores y al entrenador, lo que ha hecho que mi adaptación sea más rápida.

-Hombre, de momento no se puede quejar porque es titular indiscutible.

-Es cierto que Bordalás me conocía del Alicante y le estoy agradecido porque tener minutos siempre es importante. Nunca es fácil cambiar de ciudad y cambiar de equipo.

-El domingo se midió al Xerez, club en el que estuvo tres temporadas, y mañana se verá las caras con el Córdoba, donde militó las dos últimas campañas.

-Ambos son partidos especiales en la temporada. Siempre es bonito enfrentarte a compañeros, a amigos que has dejado allí y, lógicamente, si encima es el equipo de tu ciudad, pues lo hace más bonito todavía.

-¿Cómo encara el partido? ¿Tiene algún sentimiento por lo que pasó en el último verano?

-Para mí es un partido más de Liga. Es especial porque te enfrentas a tu equipo y al de tu tierra, pero no tengo rencor ni ánimo de venganza hacia nadie. Eso no quita que quiera ganar, pues es un partido importante para nosotros si queremos estar arriba. Pero a partir del miércoles, le deseo lo mejor al Córdoba.

-¿Esperaba algún gesto más de la nueva dirección del club? Llegó gente de la casa y usted es cordobés, pero el entendimiento no fue posible.

-Si te digo que no quería seguir en el Córdoba te engañaría y me estaría engañando a mí mismo. Traté de seguir porque me costó mucho llegar allí y no me planteaba salir, pero las cosas se dieron así y sólo me lo puedo tomar como algo que está dentro de este mundo. El fútbol tiene estas cosas.

-No es la primera vez que tiene que hacer las maletas. De hecho, su carrera ha transcurrido casi siempre lejos de casa. Pero no debe ser lo mismo salir con 18 años buscando una oportunidad que hacerlo con 30.

-Yo tenía muchísima ilusión de poder renovar y poder retirarme en el Córdoba, pero las cosas se han dado así y hay que aceptarlas como vienen. Me he venido con toda la familia a Elche porque ellos son los que me dan fuerzas para seguir en esto. Te puedo asegurar que tengo la ilusión de un niño de 18 años.

-¿Mantiene el contacto con gente del vestuario del Córdoba? ¿Le ha dado ya tiempo a hablar del encuentro de mañana?

-Durante el año intento hablar con la gente con la que he coincidido allí, con Alberto García, Alberto Aguilar, Gaspar, Fuentes... De cara al partido todavía no, pero a ver si los niños me dejan y puedo buscar un hueco para verlos en el hotel.

-Desde la distancia, ¿cómo se ve el nuevo proyecto blanquiverde?

-Bien, ilusionante. Hay gente que viene con mucha ilusión, con ganas de hacerse un hueco y tener continuidad en el mundo del fútbol. El equipo ha empezado bien la temporada y, sin lugar a dudas, verte en los puestos de arriba te da tranquilidad y confianza.

-Una de las sensaciones es Javi Hervás, otro organizador con acento cordobés. El Arcángel ha pasado del calvo de Las Palmeras al calvo del Guadalquivir.

-(Risas). Yo diría que son buenos ejemplos para Córdoba. Al final se están dando cuenta de que había cantera y que se le podía hacer un hueco en la primera plantilla sin ningún problema.

-Lo que está claro es que no tiene la presión de tener que estar arriba que sí tienen otros como, por ejemplo, el propio Elche.

-Lógicamente, el simple hecho de estar a punto de ascender la temporada pasada hace que el Elche ya sea candidato a estar arriba y pelear por los puestos de ascenso. Estamos en una buena línea, aunque nos ha faltado algo de suerte para sacar algunos puntos más en partidos anteriores. Esperemos que ante el Córdoba podamos hacer un buen partido para dar continuidad a la línea que empezamos el domingo ante el Xerez.

-¿Ve al Córdoba con opciones de ser una alternativa a esos puestos de honor?

-Por el momento está demostrando que está arriba por algo, porque se lo merece, porque está haciendo un buen juego y porque ha sido superior al contrario en la mayoría de los partidos. Está haciendo las cosas muy bien.

-Una tendencia que usted espera que mañana se rompa.

-Hombre, yo espero que no tengan su día. Ojalá sus jugadores importantes no estén bien, pero a partir de ahí que les vaya lo mejor posible. La afición del Córdoba se lo merece porque ha sufrido mucho y, por qué no va a poder ilusionarse con estar ahí todo el año...

-Que así sea.

-Pero con nosotros también.