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El Ángel Ximénez echa por tierra al final su buen trabajo ante el Granollers (26-30)

  • Un parcial de 0-6 permite llevarse los dos puntos de Puente Genil al conjunto catalán

Mitic frena en defensa a Antonio García, del Granollers.

Mitic frena en defensa a Antonio García, del Granollers. / Estefanía Hernández / Ángel Ximénez

Un increíble parcial de 0-6 favorable al Granollers en los últimos cinco minutos de partido, dio al traste con las aspiraciones de un combativo Ángel Ximénez que durante los 55 minutos anteriores hizo muchas cosas bien para doblegar a uno de los gallitos de la competición. Y es que cuando mejor panorama pintaba el encuentro, con una ventaja de 26-24 y superioridad numérica, los pontanenses se bloquearon hasta el extremo de permitir que su rival igualara y asestara el golpe de gracia definitivo para que los puntos volaran del Alcalde Miguel Salas.

No empezaron demasiado bien las cosas para los de Puente Genil, que vieron como el Granollers rentabilizaba en forma de gol sus primeros ataques. No obstante, las buenas intervenciones de Konecny, uno de los jugadores más destacados de los locales, permitieron a los de Bustos ir equilibrando el choque. Sin embargo, fue un espejismo, ya que tras el 3-3, de nuevo los vallesanos cobraron diferencias aprovechando las imprecisiones y la precipitación en el juego ofensivo de los pontanenses.

Pese a ello, Konecky sostenía a su equipo y el Granollers también comenzó a cometer errores, algo que aprovechó el Ángel Ximénez para acercarse y equilibrar el duelo. Túa niveló el partido (9-9) tras la lesión de Marc Guardia en la portería rival e incluso Mitic tuvo la oportunidad de poner a los suyos por delante, aunque una vez más los pupilos de Antonio Rama pisaron el acelerador con un 0-3 de parcial liderado por Chema Márquez y Pol Valera.

Con el 9-12 a Bustos no le quedó más remedio que pedir tiempo muerto y el cambio de defensa a 5:1 con Borges de avanzado dio buenos resultados atragantando el ataque visitante. En ese tramo final, con David Estepa enchufado y el propio Felipe Borges muy resolutivo en sus lanzamientos, el Ximénez empató (14-14), aunque el acierto de los vallesanos en esos últimos instantes, bien liderados por el veterano Antonio García y el joven Gurri, dejó un 15-16 de camino a vestuarios.

Pero tras el descanso, el conjunto de Puente Genil salió con mucha más intensidad mejorando sus prestaciones defensivas. Konecny detuvo un par de lanzamientos y en ataque el equipo se mostraba mucho más efectivo, tanto que Joao Pedro da Silva consiguió adelantar al Ximénez por primera vez con el 18-17, aunque una posterior exclusión de Mitic niveló el marcador y dio oxígeno a los catalanes. Había partido y además, bonito, ya que los dos equipos no se daban concesiones. Por momentos había intercambio de goles, pero también fallos en lanzamientos claros en seis metros que hacían que el electrónico permaneciera invariable o con ventajas mínimas para unos y otros con el paso de los minutos.

La desconexión final

Aun así, fue el Ángel Ximénez el que comenzó a decantar el encuentro con el acierto de Mitic y de Pomeranz, aunque el equipo, unas veces por mala suerte, con lanzamientos a la madera, y otras por paradas de Rangel Luan, no supo sacar partido a ataques que pudieron haberle dado una renta de dos goles. El cuadro de Paco Bustos estaba sobresaliente a nivel defensivo y parecía tomar ventaja en el pulso, más cuando José Cuenca anotó el 24-22 a falta de siete minutos y medio que motivó el tiempo muerto de Antonio Rama.

Los pontanenses seguían haciendo una buena lectura de partido, pero en los últimos cinco minutos, con dos arriba, superioridad y todo a favor, llegó la desconexión. Chema Márquez recortó diferencias, Rangel detuvo un lanzamiento claro a Joao Pedro da Silva y Adriá Martínez empató 26-26. Había margen, pero otra parada de Rangel a Borges, un gol de Antonio García y otro fallo en el lanzamiento de Javi García, producto de la precipitación y las ganas de empatar, dieron otra bola a Granollers aprovechada por Márquez para situar el 26-28, prácticamente definitivo antes de entrar en el último minuto donde el Ximénez tiró la toalla viendo como los catalanes anotaban otros dos goles más para cerrar un engañoso 26-30. Demasiado castigo para el trabajo del equipo pontanés, al que le sobraron los últimos cinco minutos.

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