Mendizorroza y el Mirandés, un cóctel explosivo para el Córdoba CF
Córdoba CF
El conjunto blanquiverde visita el domingo a un rival al que solo ha ganado una vez a domicilio y lo hará en un estadio en el que históricamente ha sufrido mucho
Adri Fuentes y Carlos Fernández, duelo al gol en el Mirandés - Córdoba CF
El Córdoba CF prepara con mimo su último compromiso antes del parón por las fiestas navideñas. Los blanquiverdes visitarán este domingo al Mirandés en un partido convertido en una oportunidad que no puede dejar escapar para cortar de raíz con la dinámica de seis semanas sin ganar que arrastran, evitando irse de vacaciones con el runrún que generaría otro resultado negativo. Para ello, eso sí, el equipo entrenado por Iván Ania tendrá se enfrenta a un equipo al que casi nunca se le ha dado bien visitar y, además, en un estadio en el que prácticamente todas las visitas terminaron en sufrimiento para los blanquiverdes.
Con Anduva en pleno proceso de reforma integral, el Mirandés está disputando sus partidos como local esta temporada en Mendizorroza. El hecho de no poder jugar en Miranda de Ebro y con la totalidad de su afición está siendo un lastre para el Mirandés, que no ha terminado de adaptarse al feudo del Alavés, hasta el punto de que solo ha conseguido dos victorias como local después de ocho partidos.
Mendizorroza está lejos de ser un fortín para el equipo que entrena Jesús Galván, pese a la mejoría palpable en sus últimos compromisos como local. Ahora bien, si para el Mirandés está resultando complicado adaptarse a su nuevo y provisional hogar, para el Córdoba CF las visitas a Vitoria han resultado históricamente poco menos que traumáticas. El CCF ha visita Mendizorroza en 12 ocasiones a lo largo de su historia y el balance no puede ser más desalentador: una victoria, tres empates y ocho derrotas.
Esa docena de precedentes que el Córdoba CF guarda en Vitoria se corresponden todos a enfrentamientos contra el Alavés, al que el conjunto cordobesista solo ha ganado una vez a domicilio. Fue en la temporada 2007-08, en la que sendos goles de Asen y Arteaga propiciaron un triunfo nunca antes vivido en suelo vitoriano y que ya no ha vuelto a producirse desde entonces. Más allá de aquel 0-2, el Córdoba ha sumado un punto en otras tres visitas al estadio de Vitoria, pero la tónica general ha sido la de la derrota.
Entre los ocho reveses encajados en Mendizorroza se encuentra el de la última visita, en la temporada 2015-16 (3-2), pero también otros especialmente dolorosos como el 5-1 encajado en el feudo vitoriano en 1981 o un posterior 3-0 en 1983. Malos recuerdos de un estadio en el que los blanquiverdes han padecido mucho más de lo que pudieron festejar.
El Mirandés, un rival incómodo
Y si jugar en Mendizorroza no es precisamente un buen augurio para el Córdoba CF, hacerlo ante el Mirandés mucho menos. Los jabatos han sido siempre un rival muy incómodo para el CCF, que solo ha logrado derrotarlos en una ocasión entre los diez precedentes que guardan ambos equipos. De hecho, el Mirandés es uno de los pocos equipos que han pasado por El Arcángel sin caer derrotado hasta el momento y son ya cinco las ocasiones en las que el cuadro de Miranda de Ebro ha visitado el feudo blanquiverde. La última, el curso pasado con un 1-2 que sirvió al conjunto rojillo para confirmar su clasificación para un play off de ascenso en el que luego rozaría con la yema de los dedos el salto de categoría.
En los otros cinco precedentes, disputados con el Mirandés como equipo local, el Córdoba CF presenta un balance de dos empates, dos derrotas y una sola victoria. Esa alegría aislada se produjo en la temporada 2015-16, en la que un Córdoba CF que venía de perder la oportunidad de asentarse en Primera División tras su último ascenso derrotó a los jabatos por un claro 0-3. Los goles de Fidel, Domingo Cisma y Raúl de Tomás rubricaron un triunfo holgado que es el único asidero al que agarrarse como precedente positivo de cara al domingo.
Para cerrar el 2025 y dejar atrás su mala dinámica, el Córdoba CF tendrá que sortear un cóctel explosivo que conjuga uno de sus estadios menos propicios y un rival incómodo hasta el extremo para los blanquiverdes. Un reto mayúsculo Iván Ania y sus futbolistas.
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