Un 'déjà vu' para el Córdoba CF: inicio calcado en puntos y sensaciones

El Córdoba CF sigue sin encontrar el camino que desea. Los blanquiverdes salvaron un punto ante el Racing de Santander con un gol sobre la bocina, pero no terminan de completar un partido solvente que invite a pensar claramente en que la consolidación del equipo está en camino. Aunque los hombres de Iván Ania mejoraron prestaciones en la fase del juego con balón, lo cierto es que las cifras son idénticas a las del curso pasado a estas alturas, con la diferencia de que la mayor exigencia que existe este curso ha propiciado el lógico nerviosismo cuando los resultados no acompañan.

Con seis jornadas transcurridas, el Córdoba CF tiene cinco puntos en su haber, fruto de una victoria, dos empates y tres derrotas. El balance de goles es de siete a favor y 11 en contra que han colocado al equipo en la decimonovena posición, la que abre la zona de descenso. El curso pasado, a estas mismas alturas, el Córdoba clavaba prácticamente esos números, con cinco puntos en su casillero, seis goles a favor y diez en contra fruto del mismo balance de un triunfo, dos empates y tres derrotas. La única diferencia es que el equipo de Iván Ania estaba entonces fuera del descenso por un punto.

Atendiendo a esa comparación directa, la situación clasificatoria del Córdoba CF no debe ser ahora mismo un problema del que preocuparse en exceso, más allá de que los resultados no son los que se esperaban desde un primer momento. Sí son más preocupantes las sensaciones que ofrece el equipo sobre el césped, sobre todo en la parcela defensiva, tanto por el funcionamiento colectivo como por los errores individuales que no dejan de repetirse.

El Córdoba CF está cerca de un promedio de dos goles encajados por partido, un dato totalmente insostenible aunque su acierto goleador fuera notable, que tampoco lo está siendo. Afianzar al equipo en defensa debe ser el primer paso para que los resultados vayan llegando con más regularidad y la clasificación refleje también esa mejoría que ahora mismo no termina de consolidar el CCF.

El problema de las expectativas

En ese afán de mejora, el Córdoba CF tiene sin embargo un problema añadido que se refleja en esa expectativa expresada por el propio club de mejorar sus prestaciones del curso pasado y que está respaldada también por la sensación general entre el entorno y la afición de que se ha construido una plantilla con más posibilidades que la que firmó una permanencia holgada.

Parece un hecho constatable que Iván Ania cuenta con más mimbres que la temporada pasada, pero lo cierto es que ni a nivel individual ni a nivel colectivo el Córdoba CF está siendo capaz de cumplir con sus propias expectativas. Esa sensación de que el técnico aún no ha sido capaz de sacar buen provecho de su plantilla ha colocado el foco para cierto sector del cordobesismo sobre él, por más que esas dudas que algunos deslizan en forma de rumores están muy lejos de la confianza que los rectores del club siguen teniendo en que el asturiano terminará por afianzar al equipo.

De momento, los números marcan que el Córdoba CF no está ni mejor ni peor que el curso pasado, más bien en una situación idéntica e insuficiente de la que debe salir progresivamente a poco que experimente el proceso de crecimiento que ya se le vio en su regreso a la Liga Hypermotion. A eso se agarran Ania y sus jugadores, que viven una suerte de déjà vu con el año pasado del que esperan calcar también el despegue que protagonizó el equipo tras un mal inicio de competición.