"Lo único que queda es levantarse y pensar en Almendralejo, que es nuestra final". El mensaje de Rafa Navarro nada más concluir el partido ante el Málaga advertía ya de la importancia del choque ante el Extremadura del domingo (Francisco de la Hera, 16:00). El Córdoba llega a seis puntos de la permanencia y dos por debajo de los azulgrana, compañeros en los últimos meses de esa zona de descenso que es hábitat perenne para la escuadra cordobesista desde hace un par de temporadas.

Una de las claves del calvario blanquiverde este curso, en el que acumula 27 jornadas consecutivas entre los cuatro últimos -fue cinco semanas colista-, es su escaso bagaje en los desplazamientos. El CCF es el peor visitante de la categoría de plata junto con el Nàstic, actual farolillo rojo de la tabla. Ambos han sumado apenas seis puntos, si bien los tarraconenses han tenido una oportunidad más (15 por 14) para idéntico botín: una victoria y tres empates.

La única alegría cordobesista llegó hace dos salidas, en el duelo directo ante un Tenerife también en posición de riesgo. Fue casualmente la única vez que ha dejado la puerta a cero (0-2) en los últimos tres meses, y es que ese hándicap defensivo sobre el que está haciendo especial hincapié Navarro es imposible de soportar para mantener una mínima esperanza de amarrar la salvación. Pero como en el resto de aspectos positivos, no ha habido señales de continuidad, pues al siguiente viaje volvieron los vicios y el Almería se impuso con comodidad para provocar la destitución de Curro Torres.

Pero si los problemas del Córdoba están fuera de El Arcángel, los del Extremadura están en casa. El conjunto azulgrana es, de largo, el peor local de LaLiga 1|2|3, con apenas 11 puntos después de 14 encuentros: tres triunfos, dos empates y hasta nueve derrotas. Su serie actual, con la que recibirá al equipo blanquiverde, es de tres victorias y una igualada, un 1 de 12 merced a la equis firmada ante otro rival directo como el Rayo Majadahonda en su penúltima cita ante su público.

El CCF se ha adelantado las últimas seis jornadas

Quizás por todo esto, uno de los objetivos del Córdoba en el Francisco de la Hera debe ser alargar la tendencia de las últimas seis batallas: golpear primero, inaugurar el marcador. Hasta ahora apenas le ha servido para ganar un partido y empatar otro, pero ante un enemigo igualmente exigido como el Extremadura y con el aval de las hechuras mostradas ante el Málaga puede ser un factor clave.

La grave situación por la que pasan ambos equipos se ha visto reflejada ya en que han cambiado en dos ocasiones ya de entrenador. El Extremadura aguantó durante 13 jornadas a Juan Sabas para dar luego el relevo a Rodri y, desde hace una semana, a Manuel. En el Córdoba, José Ramón Sandoval duró en su segunda etapa 14 partidos, uno más que Curro Torres; ahora el presente y el futuro pasa por Rafa Navarro, que sabe a la perfección lo que le espera el domingo en el Francisco de la Hera. Por ahora, para todos se presenta como un partido de mínimos entre el peor local y el peor visitante. Ahí es nada.