Bitton Sport parece dispuesta a desbloquear la situación de embargo de sus cuentas que padece el Córdoba CF. La empresa que encabezan Luis Oliver y Joaquín Zulategui ha reiterado su disposición a levantar la medida que en su día forzaron para tratar de cobrar la deuda que la entidad blanquiverde mantenía con ellos debido al contrato que Jesús León rompió con Oliver, en el que se recogían unos importantes emolumentos por ejercer la dirección general y deportiva de la entidad cordobesista.

Los socios con los que León llegó a la presidencia del conjunto blanquiverde, que salieron del club de manera repentina en el verano de 2018 cuando el montoreño decidió cortar la vinculación entre las partes, reclaman una cantidad superior a los dos millones de euros al club blanquiverde, cuantía que trataban de conseguir por medio del embargo de las cuentas de la entidad.

Con todo, desde hace meses, Zulategui venía insistiendo en que si Jesús León se marchaba del Córdoba, no habría problema alguno para acabar con dicho embargo, y así lo reiteró ayer el navarro, que asegura que la voluntad de Bitton Sport es trabajar en la salvación de la entidad cordobesista, a pesar de la delicada situación económica que se han encontrado los administradores judiciales en su desembarco –que se produjo ayer mismo– en las oficinas de El Arcángel.

Una vez mostrada públicamente la intención de levantar ese importante embargo que pesa sobre las cuentas del Córdoba, los responsables de Bitton Sport esperan que sean los administradores judiciales los que lleven a cabo una toma de contacto, para buscar las fórmulas a desarrollar con el objetivo de alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes.

De este modo, la pelota está ahora en el tejado de los administradores judiciales, quienes ya tomaron el primer contacto con la realidad del club ayer. Tanto Francisco Estepa como Francisco Javier Bernabéu son plenamente conscientes de que el desbloqueo de las cuentas de la entidad es tarea prioritaria, por lo que ese contacto entre las partes no debería tardar demasiado en producirse.

En todo caso, aunque un acuerdo con Bitton Sport permitiría al Córdoba aliviar bastante su situación, pues permitiría la entrada de cerca de dos millones de euros al club en concepto de ayuda al descenso, las dificultades seguirían existiendo.

No es el único problema

Y es que el Córdoba tiene una deuda concursal vencida superior a los 300.000 euros, más distintas cantidades pendientes con Hacienda y la Seguridad Social, que también requerirán de la habilidad de los administradores para ser renegociadas.

Además, para evitar generar un problema en lo deportivo, el club debe resolver también el impago a los futbolistas, pues en caso de alcanzar el mes de diciembre sin solucionar esos atrasos, los jugadores acumularían ya tres meses sin cobrar y serían libres para rescindir sus contratos de manera unilateral y quedar libre. Una situación que a día de hoy parece aún lejana, pero que también ocupa un lugar preferente en esa amplia lista de tareas pendientes que tienen los administradores judiciales.