Hitachi abre expediente a los trabajadores que se encerraron en la fábrica de Córdoba

Hitachi ha abierto un expediente a los trabajadores que realizaron un encierro en la factoría de Córdoba el pasado 19 de noviembre en el marco de las protestas sobre la negociación del convenio colectivo. Un grupo de empleados ocupó la nave de taller durante todo el día y la noche y la empresa presentó denuncia ante la Policía Nacional. Ahora, ha decidido abrir expediente disciplinario a los participantes por el incumplimiento de las normas de seguridad de la empresa.

Así lo ha comunicado a los trabajadores en una circular difundida en la tarde de este jueves a la que ha tenido acceso El Día de Córdoba. La empresa recuerda en esa comunicación que a lo largo de la jornada advirtió a los empleados la obligatoriedad e importancia de abandonar las instalaciones, informando también a los representantes sindicales. Ante la negativa a desalojar, pidió la intervención de la Policía Nacional, que acudió a la fábrica. Tras el encierro, decidió suspender la actividad de la fábrica desde el jueves 20 hasta el lunes 24 “con el objetivo de proteger a los empleados, así como las instalaciones y los equipos”, una medida sobre la que lamenta “los inconvenientes y la incertidumbre” que pudo causar en la plantilla.

La multinacional remarca que “en Hitachi Energy, la seguridad de nuestros empleados forma parte de nuestro ADN”. Según recuerda, en la factoría se trabaja con equipos de alta tensión y riesgo eléctrico que requieren de medidas de seguridad muy estrictas y “el incumplimiento de estas normas puede derivar en accidentes graves que ponen en riesgo la vida de las personas”. Un encierro en el taller, como el protagonizado por los trabajadores, “además de ilegal, impide a la compañía intervenir en caso de incidentes, comprometiendo la protección de quienes se encuentran en la instalación”. El cumplimiento de los estándares de seguridad “es esencial y requiere responsabilidad compartida entre la dirección y cada trabajador, evitando cualquier acción que ponga en riesgo las tareas operativas”, insiste la compañía.

De ahí que “de acuerdo con nuestro código de conducta y normativa interna”, se haya notificado disciplinariamente este comportamiento a los empleados implicados, que ahora disponen de un plazo para presentar alegaciones. Mientras tanto continúan con su actividad normal en sus puestos de trabajo.

Los trabajadores de Hitachi iniciaron el pasado día 13 una serie de jornadas de huelga y movilizaciones para reclamar la aprobación de un nuevo convenio colectivo. La negociación sobre este se ha extendido a lo largo de diez meses sin alcanzar un acuerdo y ante esta situación Hitachi Energy anunció que prorrogaría el convenio vigente durante todo el año 2026, una medida que también rechazan los delegados sindicales.

Sobre los expedientes abiertos, el comité de empresa ha considerado en un comunicado que la apertura "tensa aún más la situación" y la dirección "no tiene intención alguna de desescalar la actual situación de tensión", criticando los expedientes, el cierre de la factoría y que no se haya vuelto a negociar en el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales.

Según un comunicado enviado por CCOO, los 76 trabajadores expedientados se enfrentan a suspensiones de empleo y sueldo o incluso el despido "por haber participado en una asamblea pacífica en la fábrica a raíz de darse a conocer los expedientes abiertos al presidente del comité de empresa y el secretario".