Son el aliento de El Arcángel, el foco de animación más importante del estadio en los encuentros de local del Córdoba CF. Unos locos por los colores blanco y verde del equipo de la ciudad que también tienen su lado más humano y solidario, que da la luz en momentos tan delicados como los que ahora vive la sociedad en general, y la cordobesa en particular.

En plena crisis del coronavirus, con el país confinado por el decreto de alarma fijado por el Gobierno de España y las competiciones paralizadas sine díe, Brigadas Blanquiverdes ha cambiado las bufandas por carros de la compra y la liturgia de caminar hacia los llanos de El Arenal por la visita a los hospitales, mostrando así su reconocimiento a los sanitarios que están en la primera línea de fuego en esta batalla cuerpo a cuerpo con el covid-19.

La noche del lunes, representantes del colectivo entregaron la cena y diversas provisiones a los sanitarios del turno de noche del Reina Sofía y la Cruz Roja. Un detalle con estos héroes anónimos que viven días durísimos de trabajo para prevenir la expansión del contagio del coronavirus. Una guerra, por cierto, de todos, para lo que es básico seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias y no salir de casa.

No es la única iniciativa lanzada por Brigadas en estos días de aislamiento. En sus redes sociales mantienen el ofrecimiento de realizar la compra y mostrar su ayuda a los colectivos más vulnerables, como los mayores o los enfermos. Sin duda, una propuesta loable de quienes cada fin de semana se dejan la voz por animar a su Córdoba CF y que ahora están dispuestos a arrimar el hombro para ganar este partido contra el virus.